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Casi un millón de cubanos tienen problemas para acceder al agua potable, de los cuales más de 418 mil no reciben el servicio en los horarios y ciclos establecidos.
José Antonio Hernández Álvarez, director general de Agua, Saneamiento y Drenaje Pluvial dijo al periódico oficialista Granma que las provincias con mayores afectaciones son Guantánamo, Holguín, Las Tunas, Camagüey, Sancti Spíritus, La Habana y Artemisa .
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En total hay unos 400 mil cubanos reciben ese líquido a través de pipas, y el funcionario de esa empresa estatal advirtió de que en los próximos meses la cifra aumentará el doble, a pesar de no contar con todos los recursos necesarios para hacer frente a la crisis.
Actualmente, el servicio se ve afectado por la escasez de baterías y neumáticos, así como la rotura de los vehículos que abastecen a los barrios impactados por el déficit de agua potable y aunque la entidad aseguró que se adquirieron 108 camiones-pipas y realizan gestiones con otras entidades, no resulta suficiente para suplir la demanda.
Las roturas de los equipos de bombeo de agua potable perjudican actualmente a unos 140 mil ciudadanos, según datos oficiales, y desde hace tres años solo se han podido comprar en el mercado internacional unas 100 bombas, cifra que se encuentra muy por debajo de las 400 que deberían reponerse anualmente, según la normativa internacional.
A tono con el discurso oficial, una vez más el embargo estadounidense y el coronavirus son las justificaciones de las autoridades cubanas para evitar mencionar la incapacidad administrativa para dar respuesta a las demandas sociales en un servicio básico.
El funcionario refirió que se acudió a "soluciones técnicas" para enfrentar la crisis y aseguró que trabajan con la Empresa de Mantenimiento y Reparación de Obras Hidráulicas y la unidad empresarial de base Mantenimiento y Reparación de Equipos de Bombeo; también con la industria militar para sustituir importaciones, mientras exploran con la Universidad Tecnológica de La Habana José Antonio Echeverría (Cujae) la búsqueda de "nuevas alternativas" para sustituir algunas de las partes de las bombas hidráulicas.
Otra cifra que revela la grave crisis de abastecimiento de agua en Cuba es el incremento de salideros, que asciende actualmente a unos 600 mil, de los cuales casi la mitad se reportan en La Habana.
El funcionario especificó que ese total de escapes de agua supera la media histórica nacional que se registró en años anteriores, aunque adelantó que como alternativa el sector privado trabaja en la confección de piezas y accesorios, fundamentalmente en la gama de 20 y 25 mm, que suelen ser las de mayor demanda y afectaciones.
En Cuba más de 8.5 millones de habitantes reciben los servicios del grupo empresarial de Agua y Saneamiento, mientras que al 15% de la población restante le suministran organismos como el Ministerio de la Agricultura y el grupo empresarial Azcuba, según datos oficiales.
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