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Una familia de emigrantes cubanos que viaja con tres niñas, cruzó el Río Bravo este viernes en México y logró entrar en territorio de Estados Unidos.
Una transmisión en directo por la página de Facebook Impacto Visión Noticias muestra el momento en que la familia cubana se dispone a cruzar el río, por una zona no profunda.
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Los cubanos iban atados por una cuerda para evitar separarse por la fuerza de la corriente del río y las tres niñas llevaban chalecos salvavidas puestos, algo que desafortunadamente muchos emigrantes no pueden utilizar para su protección.
El periodista comentó las imágenes en directo y explicó que en la zona hay una vigilancia permanente. El hecho de tocar la otra orilla y ser recibido por oficiales de la frontera de Estados Unidos no significa necesariamente que estos migrantes no vayan a ser devueltos a México.
Este viernes el gobierno de Estados Unidos anunció que derogará el Título 42, una resolución que durante la pandemia del coronavirus limitó la entrada de inmigrantes por la frontera para solicitar asilo político en el país.
Alejandro Mayorkas, secretario de Seguridad Nacional (DHS), dijo que los contrabandistas dedicados al tráfico de personas aprovecharán la medida para difundir información errónea.
"Permítanme ser claro: aquellos que no puedan establecer una base legal para permanecer en Estados Unidos serán expulsados", enfatizó Mayorkas e indicó que la medida quedará levantada el 23 de mayo.
Esta semana el medio de prensa mexicano que mostró a la familia de emigrantes cubanos llegando a Estados Unidos, también publicó el jueves imágenes del cruce del río que protagonizaron más de veinte cubanos.
El grupo estaba conformado por hombres, mujeres y niños. Cruzaron por una zona baja, conocida como Piedras Negras, en Coahuilas. En este caso también estaba la patrulla fronteriza estadounidense esperando a los migrantes que lograron pasar de un país a otro sin dificultades.
No todas las personas que cruzan el Río Bravo han corrido con buena suerte. Son frecuentes las noticias de emigrantes ahogados en las caudalosas aguas que separan las fronteras de México y Estados Unidos.
Algunas zonas del Bravo pueden ser profundas y su corriente puede llegar a tener una gran intensidad que arrastra a los más experimentados nadadores.
El 29 de marzo, por ejemplo, se reportó la muerte del joven cubano Atkinson Waterman Torrens, de 24 años. Lo anunció un familiar en las redes sociales.
El hombre explicó que la causa de muerte del villaclareño fue ahogamiento, tras intentar cruzar solo el Río Bravo por Piedras Negras el 18 de marzo.
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