En respuesta a las burlas suscitadas por el tweet de Lis Cuesta en el que llama a su esposo, el presidente cubano Miguel Díaz-Canel, como "el dictador de mi corazón", el oficialismo ha impulsado un challenge en redes sociales para intentar popularizar la desafortunada frase, y feministas cubanas han considerado que constituye una forma de violencia de género y toxicidad.
Varias personas defensoras del régimen han compartido en los últimos días imágenes con parejas y amigos junto con un recuadro que dice "La dictadora de mi corazón". Además, han difundido las etiquetas "DictadorChallenge", "VamosConTodo" y "TeMolestaMiAmor".
"¡El que es lindo lo es! Y, además, por dentro y por fuera: el dictador de mi corazón", había dicho Cuesta en su recién estrenada cuenta de Twitter este domingo, desde donde ha publicado ya varios comentarios que han generado desde indignación hasta risa.
En el caso de este tweet amoroso, al que respondió su esposo diciendo "te amaré hasta el final de los tiempos", la comunidad cubana reaccionó con múltiples memes que satirizan la relación de ambos, por lo que el oficialismo, una vez más, quiso convertir "el revés" en victoria y promovió una campaña para reivindicar el halago de Cuesta al mandatario.
"Esta plataforma observa con preocupación el reto en redes sociales 'La dictadora de mi corazón', por el tipo de relación de pareja que promueve. Los mecanismos de control, sumisión y subyugación no son parte del amor ni de la pareja, son la base de la violencia que lacera este vínculo afectivo, sin distinción por los numerosos tipos de parejas", advirtió Yo Sí Te Creo en Cuba.
La organización independiente señaló que es importante apostar a relaciones equitativas, de cooperación, ayuda, amor, afecto, entendimiento y comprensión, en las que nadie sea dictador o dictadora de nadie. "¡Al maltrato, no le llames amor!", exhortó.
"Lamentamos que este reto haya surgido a raíz de un penoso tuit de Lis Cuesta, donde se olvida su carácter de 'servicio público'. Conminamos a las personas con alcance en redes sociales a que revisen aquello que promueven, sobre todo si se trata de estereotipos y creencias que están en la base de problemas como la violencia de género", aseguró el comunicado.
Yo Sí Te Creo en Cuba lleva adelante un trabajo de acompañamiento a víctimas de violencia machista en la isla y cuenta con una línea de ayuda a la que pueden acudir las mujeres que se encuentran bajo situación de maltrato o vulnerabilidad. Además, mantiene un trabajo de vigilancia de los discursos y comportamientos que reproducen las relaciones de desigualdad entre mujeres y hombres.
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