La oposición en la Cámara de Diputados de México rechazó este lunes la reforma eléctrica, uno de los principales proyectos impulsados por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Con 275 votos a favor, 223 en contra y ninguna abstención, la Cámara dijo no a la propuesta que pretendía reformular varios artículos de la Constitución mexicana en materia de energía y de acceso a la energía eléctrica, reportó el diario El Economista.
El partido Morena, que representa la iniciativa del presidente, necesitaba 53 votos de la oposición para completar las dos terceras partes de votos que exigía la cámara baja del Poder Legislativo mexicano para aprobar esta reforma.
En la conferencia de este lunes en la mañana, AMLO, refiriéndose a la derrota en la Cámara, señaló: “En vez de defender los intereses del pueblo, de la nación, se convirtieron en francos defensores de empresas extranjeras que se dedican a medrar, a robar, y estos diputados los respaldaron, a los saqueadores, muy lamentable lo que sucedió”.
El presidente mexicano no se manifestó extrañado ante la postura de la oposición y dijo que “los conservadores siempre han apoyado a los intereses extranjeros en contra del interés nacional”. Antes de que culminara la sesión de la Cámara este domingo, ya había escrito en su cuenta en Twitter: “Pase lo que pase ya estamos blindados contra la traición”.
La propuesta de López Obrador buscaba incrementar el control del Estado sobre la industria energética y restarle poder a la parte privada. El proyecto pretendía que “la Comisión Federal de Electricidad (CFE) manejara 54% de la energía eléctrica del país, además de cancelar los permisos de generación eléctrica otorgados y los contratos de compraventa de electricidad con el sector privado”, explicó el periódico mexicano.
En los últimos siete meses, el proyecto impulsado por el presidente de México ha generado disputas entre los diputados de los partidos de oposición y los aliados del actual gobierno, durante más de un centenar de parlamentos abiertos en los que se ha llevado a discusión.
Un reporte de Reuters este domingo aseguró que “el mandatario, un nacionalista en materia energética y petrolera, promociona la propuesta como vital para sus planes de transformar al país, a pesar de las críticas de empresas y gobiernos de importantes socios comerciales como Estados Unidos, quien ha cuestionado duramente la iniciativa”.
Según Rubén Moreira Valdez, legislador y coordinador de la organización política mexicana de centroderecha Partido Revolucionario Institucional (PRI), “la reforma eléctrica no prosperaría porque la propuesta era insuficiente, no se buscaron los consensos necesarios, y no era tiempo de discutir la iniciativa, además de que no se generó el ambiente político para un debate serio”.
No obstante, López Obrador había señalado antes de la decisión que, en caso de no ser aprobada la reforma constitucional por la Cámara de Diputados, presentaría ante el Congreso una reforma de Ley Minera para proteger “la soberanía energética del pueblo sobre el litio y demás minerales que resulten estratégicos y necesarios para la extracción energética”, señaló El Economista.
Esa ley, agrega el diario, determina que un organismo público descentralizado se haga cargo de la exploración y aprovechamiento de este mineral, de modo que no sea posible otorgar concesiones, licencias o contratos para la exploración, explotación y aprovechamiento del litio.
Gracias a proyectos como estos, AMLO ha ganado varios desafectos. Aunque la pasada semana venció por amplia mayoría en un referendo revocatorio, según cifras oficiales, el índice de participación fue en extremo bajo.
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