Autoridades mexicanas y estadounidenses realizan una intensa búsqueda en el río Bravo por la zona de Piedras Negras, estado de Texas, en un intento por rescatar a tres adultos y un niño de tres años que fueron arrastrados por la corriente del peligroso afluente.
De acuerdo con un reporte en vivo del canal Impacto Visión, los migrantes intentaban cruzar al lado estadounidense, pero fueron tragados por el poderoso caudal del Bravo.
Lo más leído hoy:
Los desaparecidos, cuya nacionalidad no ha trascendido, cruzaban en un grupo de siete personas, de los cuales solo tres, dos hombres y una mujer, la madre del menor, lograron llegar al lado americano.
La búsqueda comenzó desde primeras horas de la noche del jueves, pero aún no hay indicio de lo migrantes perdidos.
"La mamá del niño sobrevive, está vuelta loca, se la llevó el Instituto Nacional de Migración pero no paraba de llorar", afirmó el reportero, quien asegura que la localidad de Piedras Negras ha quedado conmocionados por el hecho.
El pasado lunes también ocurrió un trágico suceso en el río, cuando una embarazada hondureña de 23 años se ahogó mientras intentaba cruzar por Rosita Garden, aguas abajo de la reserva Kickapoo, en Estados Unidos.
El cuerpo de la mujer, que tenía siete meses de embarazo, fue recuperado por agentes de la Patrulla Fronteriza y personal de bomberos de la ciudad de Eagle Pass.
Recientemente también fue hallado el cuerpo del cubano de 25 años Juan Miguel Matamoros Cagides, quien intentó llegar al lado estadounidense por Piedras Negras, Coahuila.
Según datos del Instituto Nacional de Migración, un total de 19 cuerpos de migrantes se rescataron del río Bravo hasta abril por parte del Grupo Beta del INM en Coahuila, que tiene como misión, "proteger y defender los derechos humanos de las personas migrantes a través de acciones de apoyo como orientación, auxilio y rescate".
Sin embargo en lo que va de año han sido reportados más de 60 desaparecidos en el río, de los cuales muchos cuerpos no son recuperados tras ser arrastrados por la corriente.
No obstante, estas tragedias no han detenido la escalada de migrantes que cada día se lanzan a las aguas del río fronterizo para llegar a territorio estadounidense.
Desde finales de abril también comenzó un operativo conjunto de las autoridades de Coahuila y Texas, denominado Espejo, para frenar el fenómeno migratorio en la frontera a través del afluente.
Este operativo consiste en el despliegue de un fuerte dispositivo de seguridad a lo largo del río, especialmente en las zonas de Acuña y Piedras Negras, sitios elegidos con frecuencia por los migrantes para el cruce hacia Estados Unidos.
Esta última semana trascendió que la cifra de cubanos detenidos por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) de Estados Unidos marcó un nuevo récord de casi 35 mil en abril, según cifras preliminares citadas por el diario The Washington Post.
Archivado en:
