Una madre cubana denunció que la leche líquida que el gobierno que el Estado asigna a los niños a través de la libreta de abastecimiento, la han traído cortada dos días seguidos.
Dania Gallar, residente en el poblado de Carbonera, Matanzas, compartió en su muro de Facebook dos fotografías en las que se ve el líquido totalmente echado a perder.
"Ya esto es demasiado. ¿Hasta cuándo va a seguir la falta de respeto? (...) Ayer (viernes) nos trajeron la leche de los niños a la 7 de la noche totalmente cortada, hoy supuestamente nos repusieron la leche, vino a las 11 de la mañana y nuevamente totalmente cortada", relató.
"Entonces yo me pregunto: ¿Qué le damos de tomar a los niños, hasta cuándo, cómo le explico a mi hijo que hoy tampoco puede tomar leche? Un producto que tanta falta le hace a los pequeños de la casa, y como siempre no hay una explicación para esto. O bueno, sí: 'el bloqueo'", concluyó.
Matanzas es una de las provincias donde las autoridades comenzaron a vender leche fluida para los menores en sustitución de la leche en polvo, cuya distribución ha sido muy inestable en los últimos meses.
Igual medida se adoptó en localidades de Pinar del Río, donde a partir del primero de julio los niños de hasta seis años y las personas con dietas médicas comenzaron a recibir leche líquida debido a la escasez de leche en polvo.
El cambio produjo malestar en los usuarios, que aseguran que la leche que llega a las bodegas es "un agua", y que además, una vez que se compra corre el riesgo de cortarse, pues con los frecuentes apagones los consumidores no pueden conservarla todo el tiempo en el refrigerador.
A todo ello se suma las pésimas condiciones en que se distribuye el alimento a la población, sin ningún tipo de higiene ni seguridad.
En abril pasado, la influencer española Rosa Martorell se quedó horrorizada al ver en un punto de venta de Trinidad, a un empleado echar la leche directamente de la pipa a un tanque de plástico, usando una manguera.
"La manguera está sucia, señor, esto luego la gente se lo bebe. Lo ha tocado usted con las manos, eso muy higiénico no es", le dijo Ana decirle al hombre que manipulaba la manguera sin guantes ni toma ningún otro medio de protección.
La respuesta que recibió la turista fue tremendamente reveladora de hasta qué punto los cubanos se han acostumbrado a la dejadez: "Eso se hierve".
"La leche llega a la una de la mañana y encima llega sucia. Dicen que la gente tiene que hervirla cuando llega a casa porque si no hay quien se la beba. La leche está llena de mierda", denunció la tiktoker en sus redes.
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