Gustavo Luis Borrego, un cubano de 37 años residente en Hialeah, fue arrestado esta semana acusado de gestionar un burdel en su propia vivienda.
La Fuerza de Tarea contra la Trata de Personas de la Fiscalía de Miami-Dade -entidad dependiente de la Policía- recibió información de que las mujeres se dedicaban a la prostitución en el inmueble, ubicado en la calle 35 del Oeste de la ciudad.
La Policía dijo que el grupo de trabajo inició una operación encubierta y vio a un hombre que entraba a la casa el martes por la tarde y salía 30 minutos después.
Tras ser detenido, el hombre admitió que había respondido a un anuncio de sexo por el que pagó 140 dólares tras acordar esa cifra por teléfono con una mujer que lo citó en la mencionada dirección, según precisan medios locales citando como fuente el informe de arresto.
A continuación, un detective encubierto llamó al número telefónico del anuncio y negoció 130 dólares a cambio de sexo.
Al llegar a la vivienda, el detective le entregó el dinero a la mujer y procedió a detenerla para interrogarla.
En ese momento las autoridades también arrestaron a Gustavo Luis Borrego, que se encontraba en el patio trasero de la casa.
Medios locales no refieren si el acusado ya compareció en corte ni tampoco si le fue impuesta alguna fianza.
Al cierre de esta nota se desconocen otros detalles sobre el caso.
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