Una niña de 15 años murió por falta de recursos médicos, tras ser apedreada por otra adolescente en el poblado de Levisa, perteneciente al municipio de Mayarí, provincia de Holguín.
De acuerdo con un profesional de salud del territorio consultado por CiberCuba, la niña, cuyo nombre se desconoce, fue remitida de urgencia hacia la capital provincial y falleció el sábado último en el Hospital Pediátrico Octavio de la Concepción y la Pedraja.
“Llega a un puesto de asistencia médica y no se hace el diagnóstico oportuno lo que demora la evacuación. Era un hematoma epidural que necesita trepano y craniectomía descompresiva de emergencia”, dijo el sanitario.
El hematoma epidural es una acumulación de sangre arterial entre la capa externa del cerebro y el hueso que provoca un aumento progresivo de la presión intracraneal y, finalmente, lleva a la muerte cerebral. El trepano es el procedimiento de barrenar el cráneo para aspirar la sangre y disminuir la presión, para lo que se necesita un salón de operaciones, explica el experto.
Sin embargo, ni en el puesto médico de Levisa ni en el hospital de Mayarí se le hizo el procedimiento a la niña, por falta de “recursos y medios diagnósticos”, según el criterio del sanitario que, sumado a la demora en el traslado, la situación de la niña se complicó.
En el Hospital de Mayarí "no hay nada", aseguró el profesional de la salud en referencia a la misma institución médica, donde este mes murió una joven de 18 años por complicaciones del dengue.
“Luego el problema de la evacuación: cero ambulancia. Demoró unas doce horas en llegar al salón de operaciones. Ya con seis horas desde el trauma hay poco que hacer”, precisa en relación a la adolecente de 15 años.
El traslado en ambulancia de Mayarí a Holguín no debe exceder la hora y media, pero en su caso, la menor solo pudo acceder al salón de operaciones medio día después de ocasionado el trauma craneal.
“Cuando por fin se puede transportar llega al municipio cabecera ya en muerte cerebral. Se opera sin ningún tipo de posibilidades, sin criterio ya, porque tenía quince años. Cómo era de esperar muere ese mismo día”, lamenta.
Varias fuentes coinciden en que el incidente se trató de una agresión por parte de otra adolescente por “un problema de novios. La novia del muchacho, por celos, le cayó a predadas a la otra muchachita”, dijeron a CiberCuba dos personas familiarizadas con el caso que prefirieron no ser mencionadas por temor a represalias.
En Twitter, el activista de derechos humanos Widhner J. Ballester Cortez atribuyó la muerte de la adolescente a la negligencia médica y agregó que “otra joven la golpeó con una piedra en la región craneana y al llegar al hospital, no recibió las asistencias necesarias”.
En respuesta, un usuario con aparente conocimiento del caso defendió que la paciente sí recibió la asistencia necesaria por parte de personal calificado, "pero llegó tarde... no había nada que hacer y aún así se hizo lo que se pudo", dijo.
De acuerdo con varios médicos consultados por CiberCuba, las muertes en los municipios por falta de transporte y ausencia total de recursos médicos son cada vez mas frecuentes.
“No hace tanto murió otro joven por igual diagnóstico en un accidente, en Mayarí también. No se pudo transportar porque la única ambulancia estaba asegurando una visita del presidente”, aclaró el sanitario entrevistado en referencia al mandatario cubano Miguel Díaz-Canel, quien ha visitado la provincia al menos dos veces este año.
Dijo además que, en aquel momento, un intensivista involucrado en la atención del paciente “denunció el caso y no se le prestó atención. No son casos aislados...es el día a día por falta de recursos y nula capacidad de evacuación”, sentenció.
Levisa-Nicaro, zona rural extractiva donde se encontraba el mayor yacimiento de níquel de Cuba, es vista por sus habitantes como “uno de esos tantos pueblos fantasmas consumidos por una ineficacia en la gestión de gobierno a nivel local", que no dispone siquiera de calles transitables.
Una denuncia hace un año mostraba el grado de deterioro de la localidad y el abandono a un pueblo que por tantas décadas aportara millones de dólares al país.
No sorprende, entonces, que tampoco disponga de un puesto médico equipado para atender urgencias como la que cobró la vida de la menor este fin de semana.
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