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Rechazan en España querella de Mailén Díaz contra Global Air por accidente aéreo en La Habana

El juez Santiago Pedraz concluyó que resulta evidente la dificultad de imputar al responsable de Global Air por un delito de imprudencia grave “cuatro años después del hecho”.

Accidente aéreo en La Habana, 2018 © Granma
Accidente aéreo en La Habana, 2018 Foto © Granma

Este artículo es de hace 1 año

España rechazó la querella interpuesta contra Global Air por la única sobreviviente del accidente aéreo ocurrido en La Habana, en mayo de 2018, que dejó como saldo 113 personas fallecidas.

La demanda de Mailén Díaz Almaguer, de 23 años, y familiares de una de las víctimas ante el tribunal Audiencia Nacional no fue admitida por el juez Santiago Pedraz , con el respaldo de la Fiscalía, informó este lunes el diario La Razón de España, el cual tuvo acceso a la resolución en la que se concluye que los hechos denunciados, con alusión a supuestas “deficiencias de seguridad”, “no pueden constituir delito alguno”.

También en las conclusiones argumentaron que resulta evidente la dificultad de imputar al responsable de Global Air por un delito de imprudencia grave “cuatro años después del hecho y lejos del lugar del mismo y sin contacto con las autoridades, tanto del lugar del accidente como del país donde radicaba la sociedad”, además de recordar que cualquier otra imprudencia que no sea grave “habría prescrito por el transcurso del tiempo”.

Además, Pedraz apuntó que por el solo hecho de que el querellado fuese director general de la compañía aérea “no se puede, sin más, atribuírsele penalmente una responsabilidad de tal grado en el accidente”.

“Es obvio que la empresa no puede responder penalmente, y en tal grado” ante la ausencia de “infalibilidad de sus pilotos”, concluyó, también.

La decisión del juez Pedraz podrá ser recurrida por Díaz Almaguer, quien perdió una pierna y quedó tetrapléjica en el siniestro, y las demás personas que firmaron la querella contra la compañía aérea y su director general, Manuel R. C., de nacionalidad española, por el accidente del Boeing 737 que se estrelló en el aeropuerto José Martí de La Habana el 18 de mayo de 2018.

A principios de este mes, la única sobreviviente del desastre aéreo pidió a España una investigación sobre el siniestro que provocó la muerte de 113 personas en 2018.

Los demandantes pidieron al tribunal español que investigara a la compañía mexicana que operó el avión, Global Air, y a su director general, quien tiene nacionalidad española, tras acusarlo de homicidio (tantos como fallecidos) y lesiones imprudentes.

Según la demanda, la tripulación "no contaba con la formación adecuada para responder de forma eficiente" a una emergencia de este tipo y mantiene que la aeronave no se encontraba en condiciones "de ser operada con seguridad".

También denunciaron graves deficiencias en la formación de los tripulantes de Globar Air, los cuales presuntamente no habían realizado los preceptivos entrenamientos periódicos para enfrentarse al "desplome de la aeronave por la pérdida de sustentación".

El copiloto, que estaba a los mandos en la operación de despegue, había dormido menos de cinco horas desde que terminó su servicio la noche anterior, en lugar de las ocho horas reglamentadas por la Agencia Europea de Seguridad Aérea, lo cual habría ocasionado fatiga.

Por su parte, el informe realizado en septiembre de 2019 en Cuba por la Comisión Estatal de Investigación de Incidentes y Accidentes Aéreos y citado en el documento entregado al tribunal indica, además, la existencia de posibles deficiencias técnicas.

Tras el accidente, ocurrido en mayo de 2018 minutos después de despegar del Aeropuerto de La Habana rumbo a la ciudad cubana de Holguín, la compañía dijo que se trató de un error humano.

La aerolínea mexicana explicó que "la tripulación despegó la aeronave con un ángulo de ascenso muy pronunciado, creando una falta de sustentación que trajo como consecuencia el desplome".

El informe de Cuba indicó que nada más despegar con destino al aeropuerto Frank País de Holguín el avión sufrió un anormal y extremo ángulo de banqueo a la derecha hasta en seis ocasiones.

La última de ellas fue incontrolable para los pilotos, que "lucharon denodadamente" durante 35 segundos para salvar la aeronave, fletada por la compañía estatal Cubana de Aviación pero operado por la mexicana Damohj S. A. (conocida comercialmente como Global Air), sostienen los abogados de los demandantes.

Entre los fallecidos en el peor accidente de la aviación civil cubana falleció el español de origen saharaui Mohamed Hach.

El trágico suceso provocó la muerte de 101 cubanos, seis tripulantes mexicanos del avión y cinco pasajeros extranjeros. Fue el segundo en número de muertes en Cuba, tras el ocurrido el 3 de septiembre de 1989.

En junio de este año, Díaz Almaguer denunció ser víctima de un creciente abandono por parte de las autoridades de la isla y pidió ayuda para obtener un medicamento e insumos médicos que necesita para su tratamiento.

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