El periodista español Ignacio Ramonet, reconocido devoto del régimen castrista, insistió en que el gobierno cubano está sometido a una campaña mediática "brutal" para tratar de asfixiarlo.
Ramonet aseguró que la campaña quiere cambiar las mentes y los corazones en el interior del país a través de las redes sociales, y que para ello se invierte muchísimo dinero: decenas de millones.
"Que nadie crea que cuando recibe en Cuba un meme, o que recibe un mensaje mediante Facebook, Instagram, YouTube, Tik Tok que eso viene de un personaje, de un amigo, un familiar, eso está elaborado en laboratorios; eso es el resultado de genios de la comunicación que han laborado en publicidad, en marketing, en el cine", subrayó.
"Estos mensajes tienen varias etapas, porque se trata de crear primero la duda, de instigar un movimiento que haga dudar, que haga que la gente repita, porque los memes se repiten a toda velocidad", recalcó.
El escritor, quien participa en el XVI Encuentro Estatal de Solidaridad con Cuba, en la provincia de Valencia, afirmó que los enemigos de la revolución intentan desprestigiarla ante el resto del mundo y mostrarla como el modelo que no se debe imitar.
"Se trata de hacer una campaña hacia la opinión pública internacional, tratando de mostrar que Cuba es un infierno, que es una banda de carniceros y tiranos que se han amparados en el poder, que se está abusando de los ciudadanos, etcétera; la descripción de algo que tiene que repeler a la ciudadanía exterior", dijo en declaraciones al portal Cubadebate.
El autor del libro Cien horas con Fidel, que recoge conversaciones sostenidas con Castro entre 2003 y 2005, concluyó diciendo que aunque la batalla actual es diferente porque las armas no son las mismas, el objetivo es igual: atacar a la revolución.
"Pero la revolución cubana siempre ha conseguido resistir, y de igual manera la sociedad cubana está resistiendo", concluyó.
En abril pasado, el intelectual español aseguró que las multitudinarias protestas del 11 de julio fueron "relativamente limitadas", y alabó la respuesta que dio el gobierno de Díaz-Canel.
"Han sido unas protestas relativamente limitadas y que las autoridades han enfrentado con mucha lucidez y con mucha transparencia", declaró a la agencia EFE.
Ramonet vinculó las manifestaciones en Cuba a la pandemia, y añadió en otros países como Colombia, Chile o Francia, también hubo protestas y fueron reprimidas "de manera mucho más brutal".
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