Vídeos relacionados:
La jornada electoral para elegir a los delegados a las Asambleas Municipales del Poder Popular este domingo en Cuba ha estado marcada por la poca participación, el acoso policial y los cortes de internet a opositores.
Según la actualización publicada en la tarde por el medio oficialista Cubadebate, al cierre de la 1:00 p.m. habían votado 4,454,823 cubanos, lo que representaba solo el 53.79% del padrón electoral.
Lo más leído hoy:
Hasta las 2:00 p.m. en Camagüey solo había votado el 54 por ciento de los electores, de acuerdo con ese sitio web.
En La Habana la apatía fue evidente. En un recorrido hecho por el diario digital independiente 14yMedio en los municipios Centro Habana, Plaza de la Revolución, Cerro y parte de Diez de Octubre, los colegios electorales se veían vacíos o con muy poca afluencia de personas, de acuerdo con el reporte.
Según expuso ese portal de noticias, algunos asistentes declararon que acudirían a las urnas para “no marcarse pero que anularían su voto.
Más de ocho millones de cubanos fueron convocados para asistir este domingo a las elecciones municipales del Poder Popular, para las cuales se habilitaron 23,480 colegios electorales en todo el país, refirió Cubadebate.
Aunque el portal oficialista señaló que se habían presentado algunas incidencias en los colegios electorales, relacionadas con afectaciones de la electricidad y que fueron resueltas con la instalación de grupos electrógenos, nada salva la baja asistencia a los comicios.
Pasado el mediodía la participación era bastante escasa (53.79%) y representaba un 20% menos de la registrada a esa misma hora en las elecciones correspondientes a 2017 (72.86%), indicó en Twitter el Proyecto Inventario.
Según informó Radio y Televisión Martí, en provincias orientales el panorama también se caracterizó por la baja asistencia.
En Holguín, según reveló, el Colegio # 1 de la circunscripción 14 solo tenía presentes a las 9 de la mañana a ocho personas de las 129 identificadas en esa zona, según informó Luis Machado, de la Observación de Derechos Electorales del Comité Ciudadano por la Integración Racial.
Ante la baja asistencia, el Consejo Electoral Nacional decidió de forma repentina extender hasta las 7 p.m. el horario de votación, aunque según las autoridades, la determinación del gobierno obedecía a que los Consejos Electorales y los votantes de varios territorios solicitaron poder ejercer su derecho al sufragio.
Durante la jornada se han denunciado, igualmente, detenciones y cortes del servicio de internet a activistas y opositores encargados de monitorear las elecciones de forma independiente.
El presidente del Movimiento Cubano Reflexión, Librado Linares, fue obligado a abandonar su puesto de observador independiente en un colegio de Camajuaní, en Villa Clara, dijo Radio y Televisión Martí.
La activista María Mercedes Benítez fue detenida a las 11 de la mañana cuando recorría algunos colegios electorales y fue liberada cuatro horas después, denunció la organización no gubernamental Cubalex.
Otros activistas de grupos de monitoreo electoral han sido obligados a permanecer dentro de sus viviendas por la Seguridad del Estado.
Juan Antonio Madrazo Luna, líder del Comité Ciudadanos por la Integración Racial (CIR) y miembro de la iniciativa de Observadores de Derechos Electorales, dijo a Diario de Cuba que luego de recorrer colegios del municipio habanero Plaza de la Revolución en calidad de observador, y habiendo regresado a su casa, un agente de la Seguridad del Estado le advirtió que debía permanecer en su vivienda y abandonar la tarea de verificar el proceso electoral.
Asimismo, ubicaron una patrulla policial afuera de su domicilio para vigilarlo y les cortaron internet a él y otros opositores, según refirió.
A Marthadela Tamayo, de la Red Femenina de Cuba, y su pareja Osvaldo Navarro, la policía política les prohibió también salir de su vivienda a realizar la observación del proceso electoral, además, señaló Diario de Cuba, tienen interrumpido el servicio telefónico.
Además del asedio a los grupos opositores, la jornada electoral ha estado precedida de un corte masivo de internet que afectó más del 70 por ciento del tráfico de la red en Cuba, que se extendió durante toda la madrugada.
La sociedad civil cubana promovió la campaña #YoNoVoto para ejercer una “abstención activa o ideológica”, considerada como un gesto político de rechazo a la legitimidad del sistema político.
Sustentados en la idea de que el proceso electoral no es más que una farsa que busca legitimar al gobierno de la llamada “continuidad”, integrantes de la sociedad civil independiente impulsaron la no participación a través de redes sociales.
Archivado en: