Un cubano que se identifica en las redes sociales como Juan Carlos Pérez Pérez denunció el desabastecimiento en una tienda en moneda libremente convertible (MLC) de La Habana.
Pérez mostró como una tienda recaudadora de divisas en el municipio Cerro tenía las neveras de productos congelados completamente vacías.
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"Aquí la tienen cubanos, peladita completa. No hay nada en los fríos estos (neveras). Mira... vaciítos", dijo en un video publicado en Facebook.
El cubano comentó que las personas no deberían entregar las divisas al Estado, porque no existen garantías de que con el "dinerito plástico" que entregan a cambio de las monedas extranjeras, las personas puedan conseguir las cosas que necesitan en una tienda en MLC.
"Cubano, luego que le das tu divisa fuerte al gobierno te embarcaste, porque ellos te devuelven en cambio un dinero plástico, inexistente, que solo sirve para comprar en esas tiendas que por demás siempre están, como en el vídeo, desabastecidas", dijo Pérez en Facebook.
En criterio del internauta, el Estado cubano no se preocupa por la población y es incapaz de garantizar alimentos al pueblo.
"A ellos no les importa si tienes qué comer o no, si resuelves o no, solo les importa tu moneda fuerte, lo demás no es su problema, sino tuyo. No a las tiendas MLC. Abajo la tiranía", dijo Pérez.
Una persona comentó su publicación y aseguró que en otras visitas hechas a esa tienda en MLC le ha ocurrido lo mismo.
"Así mismo es, desgraciadamente yo he ido y me ha pasado lo mismo. Es una falta de respeto y una burla lo que tienen con el pueblo", dijo.
Esta semana otro cubano denunció que no solo hay desabastecimiento en las tiendas en MLC, sino también robos por las "multas" que imponen algunos trabajadores a los clientes, pues se dan casos frecuentes de cobros de productos por encima de lo que realmente valen.
El método que usan en caja es marcar el código de barras de un artículo y hacen como si el escáner no pudiera leer el del producto original que quiere llevar el comprador. Luego "pasan el escáner en una tablilla, previamente preparada con algunos códigos de barras, en ese momento escanean el código de barras" de un producto más caro.
La persona que hizo la denuncia de este tipo de estafas también explicó que las cajeras hacen una "evaluación visual de la posible víctima" y por lo general eligen a ancianos, personas con prisa, gente que compra variedad de productos, y a quienes van acompañados por niños. "Si logras darte cuenta de la estafa, simplemente se excusarán, culpando al escáner".
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