Bad Bunny ha comenzado el 2023 en el ojo del huracán por tirarle el móvil de una fan al mar cuando intentaba inmortalizarse con él en República Dominicana. Las imágenes han dado la vuelta al mundo causando gran polémica a su paso, y es que la mayoría no están de acuerdo con la reacción que tuvo el artista puertorriqueño, que incluso intentó justificarse en un tweet que más tarde borró.
"La persona que se acerque a mí a saludarme, a decirme algo, o solo conocerme, siempre recibirá mi atención y respeto. Los que vengan a ponerme un cabrón teléfono en la cara lo consideraré como lo que es, una falta de respeto y así mismo lo trataré yo", decía el intérprete de "Safaera" en un mensaje que más tarde borró de su perfil de Twitter.
Desde entonces el Conejo Malo se ha mantenido en silencio y fuera del foco. Hasta ahora.
Las cuentas de redes sociales del artista han sufrido cambios significativos en las últimas horas. Su perfil de Instagram se ha privatizado, por lo que todos aquellos que no seguían al cantante hasta ahora no pueden ver sus fotos y tendrán que pasar por su filtro para poder ser uno de sus followers.
Mientras tanto, en Twitter ha cambiado la biografía por un "Me van a extrañar...". Una frase con la que se estaría despidiendo por una temporada de sus seguidores y también del mundo virtual.
Todo parece apuntar que el artista espera que este incidente se olvide, algo realmente complicado teniendo en cuenta su popularidad y que el vídeo es viral en todas partes. A esto hay que sumarle, que su acción con su fan ya estaría teniendo consecuencias negativas para él y las reproducciones de sus canciones en las plataformas de streaming estarían bajando significativamente.
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