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El Partido Nacional de Honduras denunció que los maestros cubanos enviados a ese país funcionan como agentes de injerencia ideológica y advirtió a la población que debe tener cuidado.
“De forma opaca, poco transparente y con objetivos pedagógicos dudosos el gobierno socialista de Libre trajo a 120 maestros cubanos a Honduras”, declaró la organización en un comunicado, según el reporte del diario La Tribuna.
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El partido de derecha considera que los maestros hondureños son suficientes para erradicar el índice de analfabetismo del 12 % que arrastra el país centroamericano.
“Contamos con suficientes pedagogos y maestros con enorme experiencia y diversos profesionales preparados en las universidades de Honduras y en el extranjero capaces de impulsar un programa nacional de alfabetización”, aseguró.
La dirección del Partido Nacional, uno de los más tradicionales de Honduras, sospecha que los maestros cubanos traen intenciones ocultas y los acusa de venir a propagar la ideología comunista.
“Dice el ministro de Educación que los maestros cubanos solo vienen a asesorar a los maestros hondureños, si así fuera, ¿por qué se deben desplazar a los 298 municipios del país”, cuestionó.
Finalmente, demandó la publicación del contrato que determinó la presencia de maestros cubanos en Honduras.
A finales de diciembre pasado, al menos 123 maestros cubanos llegaron a Honduras para participar en la campaña de alfabetización que impulsa el gobierno izquierdista de Xiomara Castro.
Los pedagogos cubanos arribaron a Tegucigalpa este martes y fueron recibidos por el expresidente y asesor presidencial, Manuel Zelaya, esposo de la actual mandataria hondureña.
Los maestros de la isla implementarán en el país centroamericano el método cubano “Yo sí puedo” para alfabetizar en ese país.
En agosto último, tras el anuncio de este convenio con el gobierno de la isla, se desató en Honduras una encendida polémica ante el temor de que los docentes nacionales perdieran sus puestos de trabajo con la llegada de los cubanos.
El gobierno de Xiomara Castro trató de contener el revuelo causado por la polémica argumentando que los cubanos solo apoyarían, pero no pondrían en riesgo los puestos de trabajo de los profesionales hondureños.
“Son técnicos los que vendrían, y ellos van a fortalecer el conocimiento de los compañeros que van a facilitar (las clases)”, indicó en esa ocasión el viceministro de Educación, Edwin Hernández.
Hernández aseguró, además, que los cubanos implementarían el método de alfabetización “Yo sí puedo”, que ya había sido puesto en práctica en ese país durante la administración de Manuel Zelaya.
También dijo que la llegada de estos maestros no significaba “una gran erogación al Estado, comparado con el beneficio de eliminar el analfabetismo y desarrollar la segunda parte del ‘Yo sí puedo’ que es ‘Yo sí puedo avanzar’”, la cual -según explicó- permitirá que en un menor tiempo los adultos puedan cursar su educación básica y estudiar una carrera.
No obstante, mientras el régimen exporta maestros, en la isla el déficit de estos se ha hecho notar en provincias como Sancti Spíritus, Ciego de Ávila y La Habana.
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