En medio de la escasez de alimentos que padece el pueblo de Cuba, al gobernante Miguel Díaz-Canel se le ha ocurrido una última idea para aumentar la producción.
El sábado, en una reunión con los máximos dirigentes de La Habana, Díaz-Canel abogó por ampliar el vínculo con universidades y centros de investigación para enseñar técnicas de agroecología a los campesinos.
Según el mandatario, hay experiencias que demuestran que se obtienen buenos resultados, pero esa no es la realidad de la capital.
"Eso demuestra que hay potencialidades y creatividad, que hay quienes, con los mismos problemas de todos han logrado avanzar, pero eso no sucede en todos los lugares", dijo.
Díaz-Canel realiza por estos días visitas a las provincias, con el objetivo de evaluar las potencialidades para lograr que el 2023 sea "un mejor año".
El gobernante dijo que La Habana tiene bien definidas las líneas estratégicas de trabajo, que recogen sus retos fundamentales, e insistió en resolver los problemas a partir de las experiencias positivas.
El primer secretario del Partido, Luis Antonio Torres Iríbar, señaló que la provincia es una ciudad de industria y servicios, y que los mayores esfuerzos deben concentrarse en la producción de alimentos y de materiales de la construcción, la salud, el transporte, la industria y el desarrollo local.
Acerca de la alimentación, Iríbar anunció que aunque La Habana es la provincia con menor área cultivable, para este año hay casi una veintena de propuestas en el ramo agropecuario.
Según el dirigente, en 2023 aumentará la oferta de alimentos gracias a más de 10 iniciativas en la industria alimentaria, que van desde el cultivo de peces en estanques y presas hasta la venta de productos del mar en bases de pesca deportiva, además de otras acciones en fábricas de conservas y de bebidas y refrescos, y de negocios con inversión extranjera en algunas factorías.
En la reunión de la capital participaron también el primer ministro Manuel Marrero Cruz y miembros del Secretariado del Comité Central.
"En las reuniones que estamos realizando, debatimos el modo de obtener nuevos resultados, tras un período de arduo trabajo y toma de decisiones que, con el esfuerzo y la constancia de todos, deben tributar a un 2023 mejor", afirmó Marrero.
Tanto él como Díaz-Canel llevan meses diciendo que 2023 será un año mejor.
A finales de noviembre, el gobernante prometió que 2023 será un mejor año, pero a partir de que todo el mundo trabaje "intensamente", y llamó al pueblo a sumarse a ese trabajo, con el ejemplo de los dirigentes.
Por su parte, el primer ministro aseguró en diciembre estar convencido de que 2023 será mejor para Cuba, una frase que muchos internautas comentaron.
"En Cuba llegaremos a 64 años de miseria, insalubridad, escasez de alimentos y medicamentos, pobreza, hastío, represión, etc.", argumentó uno.
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