Familiares de un cubano fallecido en el municipio matancero de Jagüey Grande debieron empujar el carro fúnebre porque no había otra opción para transportar el cadáver.
La internauta que se identifica en Facebook como Cari Gómez Fernández dijo en una publicación que su hermano era un trabajador cumplidor con la revolución, sin embargo, su entierro fue indignante.
"Quiero compartir el entierro de mi hermano. Esto sucedió en Jagüey Grande. Mi hermano, un buen trabajador, cumplidor con nuestra Revolución, y mira cómo fue su entierro", escribió, y adjuntó varios videos del triste momento.
Gómez denunció que no había carro para transportar el cadáver, sin aclarar si el vehículo debió ser empujado por rotura o por falta de combustible.
Los videos muestran a al menos seis hombres empujando el auto, mientras que decenas de personas caminan detrás del cortejo sujetando sus bicicletas.
En uno de los materiales se escucha a una mujer gritar: "¡Papi, tú no merecías esto!".
La crisis de combustible en Cuba, sumado al mal estado de los coches fúnebres, han generado escenas escalofriantes en varias zonas del país.
En Las Tunas el cadáver de una mujer debió ser transportado en un carro de la oficina de Correos, mientras que en Güines un fallecido fue trasladado por sus amigos en un bicitaxi porque las autoridades no enviaron transporte para recogerlo.
En un desgarrador video publicado en Facebook por el medio independiente ICLEP, un joven denunció indignado la situación, mientras mostró cómo cargaba en sus piernas al difunto, identificado como Yoandris Castillo Arias, de 36 años.
El joven explicó que llamaron varias veces y las autoridades no enviaron transporte, pero comenzó a cambiar de coloración y a coger peste por lo que decidieron trasladarlo en el bicitaxi, mientras decenas de amigos acompañaron el cortejo en bicicleta.
Varias denuncias similares han estremecido a los cubanos en los últimos años. En 2019 en la propia ciudad de Güines familiares de una mujer fallecida debieron trasladarla en una camilla de hospital por la carretera hasta la funeraria, porque no había carro fúnebre disponible.
También han trascendido denuncias de cadáveres que han debido ser transportados en carretillas, carros de alimentos, de la Empresa de Telecomunicaciones y hasta en coches tirados por caballos.
El régimen cubano ha invertido en carros para el uso de la Policía, pero la inversión destinada a carros fúnebres y ambulancias ha sido deficiente.
El pasado abril trascendió que nuevos carros fúnebres llegaron a Cuba procedentes de China, que aliviarían la crítica situación de este servicio en el país.
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