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El presidente francés, Emmanuel Macron, fue captado en cámara sonriéndole al dirigente comunista Miguel Díaz-Canel, mientras asiste a la Cumbre para un Nuevo Pacto Financiero Mundial.
Mientras Díaz-Canel acusaba al actual orden económico y financiero internacional de ser "injusto, antidemocrático, especulativo y excluyente", Macron le sonreía amablemente como anfitrión del encuentro internacional que organizó y al que Cuba asistió en calidad de presidente pro témpore del Grupo de los 77 + China.
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Las imágenes divulgadas por el gobierno de La Habana en redes sociales muestran una relación muy cercana entre el líder del Partido Comunista de Cuba y Macron, que por el momento no ha acusado a Díaz-Canel de violar los derechos humanos y reprimir a quienes se oponen a su régimen totalitario.
Francia fue uno de los países que primero abogó por el derecho de los ciudadanos a manifestarse pacíficamente cuando el grupo Archipiélago convocó a protestar en la vía pública hace un par de años.
"Hacemos un llamado al gobierno cubano para que garantice el derecho del pueblo cubano a reunirse y manifestarse pacíficamente, respetando el acuerdo de diálogo político y cooperación de 2016 entre los Unión Europea y Cuba", dijo en 2021 ese gobierno.
Sin embargo, activistas defensores de los derechos humanos, opositores e internautas coinciden en que este encuentro en Francia de Macron con Díaz-Canel no solo blanquea a la dictadura, sino que deja a un lado asuntos que son cruciales para la sociedad civil, que sufre la represión y el hostigamiento.
Por el momento se desconoce si Cuba ha logrado, tras la participación en esta cumbre, renegociar su deuda con los acreedores, incluido el Club de París.
Los medios oficialistas solo se limitan a repetir la propaganda habitual que inunda periódicos, páginas web, canales de televisión y emisoras de radio; mostrando las visitas oficiales de Díaz-Canel como un éxito de gobierno; aunque concretamente no se logre nada.
Para el economista Elías Amor, el discurso del mandatario cubano no solo fue un fracaso, sino que demostró su desconocimiento del mundo actual, poniendo en dudas la capacidad de su equipo de asesores.
"La situación a la que sus políticas han llevado al pueblo cubano se parecen mucho a esa descripción agónica que, por otra parte, cuesta encontrar en el mundo de la segunda década del siglo XXI. De lo que Díaz-Canel puede estar seguro es que, con este tipo de discursos, no le van a dar dinero. La caja seguirá estando vacía", aseveró el experto..
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