¿Cambio climático o proliferación de teléfonos móviles y redes sociales?: Esa es la pregunta que se hacieron muchos ante las imágenes compartidas por el sitio lifestyle_miami en las que se ve a un enorme cocodrilo nadando frente a la costa de Miami.
“¡Gran cocodrilo de agua salada! Parece que somos más y más de estos por aquí últimamente”, indicó el sitio de sucesos en su publicación, en la que compartió el video grabado por unos usuarios que avistaron al enorme reptil nadando en el mar.
Las imágenes no permiten identificar si se trata de un cocodrilo de agua salada (Crocodylus porosus), considerado el de mayor tamaño del mundo y el mayor reptil del planeta.
Aunque las principales poblaciones de este peligroso y agresivo reptil se encuentran en zonas pantanosas desde el sudeste asiático hasta el norte de Australia, y no en Florida, los avistamientos y encuentros insólitos -algunos de ellos peligrosos- con animales salvajes se han hecho virales este verano en el Estado del Sol.
En fechas recientes, medios de Florida recopilaron una lista de los principales avistamientos de animales salvajes durante este año en el estado. Tiburones, caimanes, cocodrilos, osos, panteras, serpientes pitón y hasta orcas… han sorprendido, alarmado y, no pocas veces, dado un susto tremendo, a residentes de Florida.
Por desgracia, también se han reportado sucesos trágicos, que advierten sobre el riesgo de entrar en contacto -intencional o accidentalmente- con algunas de estas especies.
El cocodrilo captado recientemente en el mar frente a Miami (o Pompano Beach, según los comentarios de algunos usuarios) podría ser un cocodrilo americano, que se distingue por su gran tamaño, generalmente entre 3 y 4 metros, llegando hasta los 6 m de longitud y peso medio de 500 kilogramos.
Estos animales se distribuyen desde Florida, hasta algunas islas del Mar Caribe y zonas costeras del golfo de México, incluyendo ríos de la costa caribeña de Honduras, Nicaragua, Costa Rica, Panamá, Colombia y Venezuela.
Entre sus principales características están las glándulas en sus párpados que secretan el exceso de sal a través de los ojos en forma de las famosas “lágrimas de cocodrilo”, razón por la cual pueden vivir tanto en aguas dulces como salobres e incluso adentrarse en el mar para colonizar nuevos territorios.
Debido a su metabolismo ectotermo, pueden pasar largos periodos de tiempo sin comer y hasta dos horas sin respirar. Se alimentan de aves y toda clase de vertebrados, incluidos mamíferos de gran tamaño que caza por sorpresa cuando se acercan a beber agua.
Su carácter es mucho más peligroso que el del aligator (Alligator mississippiensis), pues no duda en atacar a los humanos al verse invadido. En EE.UU es una especie protegida desde el año 1975. En México, es una especie considerada en riesgo sujeta a protección especial.
¿Qué opinas?
COMENTARArchivado en: