Una cubana se enfrentó a trabajadores de la Empresa Eléctrica de La Habana por el mal servicio que ofrece, las elevadas tarifas que impone y por ser responsable de la rotura de sus electrodomésticos.
La protesta de la usuaria fue grabada en video por el activista Ángel Cuza y difundida a través de las redes sociales del medio independiente ADN Cuba, indicando que esta se debió a “los altos costos, el mal servicio y los abusos que cometen los inspectores”.
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Entre las quejas expresadas por la mujer, dijo que la Empresa Eléctrica le había extendido una factura de 3,010 pesos. Al protestar por la elevada cifra y negarse a pagar, los trabajadores de la empresa estatal se llevaron el reloj contador.
Cuando finalmente pudo pagarla y vinieron a instalar el reloj, se produjo un cortocircuito que afectó a sus electrodomésticos. “Rompió el aire, rompió el frío”, se quejó la mujer, discutiendo con los trabajadores en plena calle, en el habanero barrio de Marianao.
“Yo nunca he dejado de pagar la luz”, dijo la mujer enseñando una carpeta llena de recibos y haciendo evidente el hartazgo que esta situación produce, justo cuando el país atraviesa una crisis energética brutal, con apagones diarios y prolongados, y llamados del régimen cubano a soportar la “coyuntura” con “resistencia creativa”.
A comienzos de julio, el activista cubano Adelth Bonne Gamboa denunció un sorprendente y alarmante aumento en la factura eléctrica de su hogar, cuestionando la gestión y los cobros por parte de la única empresa eléctrica que hay en Cuba.
"¿Hasta cuándo va ser el robo y el mal trabajo de estos comunistas?, preguntó Bonne Gamboa.
El tema del suministro eléctrico y los precios de la electricidad son recurrentes puntos de descontento en Cuba, y muchos ciudadanos han expresado su frustración por la inestabilidad del servicio y las altas tarifas energéticas.
A inicios de este año, en Pinar del Río, cientos de clientes se quejaron porque recibieron facturas con consumos sobregirados, situación que las autoridades no supieron controlar.
Descontrol de funcionarios y trabajadores de la empresa eléctrica, así como una falta de personal para trabajar de manera organizada, generaron una situación de alarma entre los habitantes de esa provincia cubana, que meses antes habían sufrido los embates de un huracán, que los dejo durante semanas sin servicio eléctrico.
En marzo, la Empresa Eléctrica de Matanzas tuvo que indemnizar con 202.60 dólares a una familia que denunció la rotura de varios equipos electrodomésticos en su casa por "el alto voltaje originado en las redes eléctricas".
“Concluimos que el daño a la propiedad originado por causas técnicas imputables a nuestra empresa procede a favor del reclamante. Al mismo tiempo, daremos continuidad al expediente, según establece la Resolución 400/2021, de la Unión Eléctrica", respondió la estatal matancera.
La entidad precisó que “se realizó el convenio de pago en MLC para la indemnización de los bienes averiados por un monto ascendente a 202.60 USD", y dieron por solucionada la queja.
Sin embargo, son muchos los usuarios que se quejan de demoras para indemnizar a los clientes por daños a la propiedad, como recogió en abril del pasado año un artículo del periódico oficialista Invasor criticando las demoras de la Empresa Eléctrica en Ciego de Ávila.
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