El Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) denunció la muerte del preso político Luis Barrios Díaz y exigió que se realice en Cuba una investigación urgente sobre este caso.
La organización no gubernamental explicó, en un comunicado en Twitter, que "desde agosto de 2023 Luis Barrios Díaz presentaba una situación de salud que exigía de los fiscales redoblar el control de legalidad, de seguridad y promover de manera oportuna el protocolo de actuación establecido para preservar su salud".
Ese protocolo permite "liberar a reclusos en peligro de padecer y sufrir graves secuelas a causa de alguna enfermedad, atendiendo a razones humanitarias", pero el gobierno cubano, al parecer, no lo cumplió.
"Estas medidas tienen una aplicación general y su inaplicación por motivos de discriminación de cualquier índole, entre ellas, el político, es vergonzosa" señaló el OCDH.
Piden a la Sala de Ejecución del Tribunal Provincial de La Habana que "libre el testimonio de denuncia por conducto de su Secretaría de Gobierno a la Fiscalía Regional Militar de La Habana conforme obliga el artículo 6 de la Ley de Tribunales de Justicia, a fin de que sean investigados, juzgados y condenados administrativa, laboral, civil y penalmente todos los corresponsables de la muerte de Luis Barrios Díaz".
El OCDH recordó que "la muerte del prisionero político fue bajo las normas del derecho carcelario existentes en la Ley y Reglamento sobre Ejecución de Sentencias Penales. Son responsables de su aplicación el Sistema Penitenciario y el departamento de Control de Legalidad de Establecimientos Penitenciarios de la Fiscalía Provincial de La Habana, órgano subordinado a Lisnay María Mederos Torres, Fiscal Jefa Provincial".
Otra organización no gubernamental que se sumó a denunciar el caso y exige una investigación, es la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
Hicieron en sus redes sociales un llamado al Estado a investigar imparcialmente el fallecimiento de Luis Barrios Díaz, por sospechar que la "muerte estaría relacionada con la ausencia de atención médica adecuada en prisión".
El gobierno de Estados Unidos, a través de su embajada en La Habana, manifestó indignación tras conocer la muerte del preso político a causa de una presunta negligencia médica.
La familia del fallecido asegura que lo ocurrido a Luis Barrios Díaz es "un asesinato", argumentan que el régimen lo dejó morir sin la asistencia médica que requería su caso.
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