En medio de la incertidumbre social y el estado de opinión negativo en la mayoría de la población por el paquete de medidas que trae una subida de precios e impuestos a servicios básicos como el agua, el gas, el transporte y la energía, entre otros, el gobierno cubano vuelve a la carga, ahora para anunciar “varios procesos políticos” durante el año 2024.
Los medios de divulgación de la presidencia, en la red social X, dan cuenta de que los procesos políticos tienen “el fin de acompañar la implementación de las Proyecciones del Gobierno para corregir distorsiones y reimpulsar la economía cubana en el 2024”.
Desde la tribuna del Consejo de Ministros, el gobernante Miguel Díaz-Canel Bermúdez dijo que el interés es “abordar con coherencia la temática social, ideológica y económica” en el país, a sabiendas que el entorno social no les favorece debido a implementaciones fallidas, como la llamada “tarea ordenamiento” o la imposibilidad en 2023, después de tantas promesas, de alcanzar el crecimiento proyectado del 3% para el Producto Interno Bruto (PIB).
Díaz-Canel volvió a lanzar las habituales amenazas de los dirigentes cubanos, haciendo un llamado "a enfrentar todo lo que se aparte del espíritu de la Revolución en nuestra sociedad".
El mandatario adelantó que las medidas van a ser debatidas con la población y que “son necesarias e impostergables, porque corrigen profundas distorsiones y desviaciones estructurales, que lastran el desempeño de la economía cubana”, siempre sin ponerle nombres concretos a las situaciones que han llevado a la isla a una grave inflación y a elevados precios en un mercado nada abastecido por el Estado.
Díaz-Canel recurrió a las palabras de siempre, que buscan alentar en un ambiente que no es favorable para el régimen, por el descontento social que existe, y dijo: “si crecemos en la economía, si dependemos menos de las importaciones, si exportamos más e incrementamos la captación de divisas que el país necesita, ¿para quién es eso?, es para la población”.
Con esta idea en la mano, el gobernante rechazó los intentos de los “enemigos de la Revolución” de presentar las Proyecciones del Gobierno cubano como un paquete neoliberal, al estilo de otros procesos en la región y el mundo, donde prima “el sálvese quien pueda” y todo es “tierra arrasada”.
Por su parte, el primer ministro Manuel Marrero Cruz admitió las críticas a las que han estado sujetas las decisiones gubernamentales, aunque no se refirió que esos errores forman parte del escepticismo de la población en estos nuevos anuncios.
“Ya el pueblo no exige más de nosotros esfuerzos, sacrificios, consagración; el pueblo exige de nosotros resultados”, dijo ante los ministros y otros dirigentes cubanos.
Alejandro Gil Fernández, Ministro de Economía y Planificación, se refirió explícitamente a las medidas y dijo que estas "no son fundamentalmente de incremento de precios, sino que abarcan el necesario impulso a la actividad productiva, el incremento de la producción nacional, las exportaciones e ingresos en divisas y la estabilización macroeconómica”.
Al parecer, los dirigentes cubanos buscan “incentivar el ahorro, hacer un uso más eficiente de los recursos, y buscar una distribución más justa y equitativa de la riqueza que se genere”, según las palabras del ministro.
“Ese es el sentido de las tarifas y de los precios que estamos actualizando, porque se han quedado rezagados en el tiempo, desconectados de los costos, y hoy por hoy lo que realmente está sucediendo es que se está incentivando el derroche”, argumentó.
Además, Gil Fernández adelantó que en febrero se presentará una propuesta “para redimensionar el mercado cambiario, la intervención del informal y el control del tipo de cambio en el país, lo que incluye, la determinación de la tasa de cambio y la formación de precios”.
Añadió que “se está trabajando fuerte en esto por el impacto que tiene para el fomento y el estímulo productivo”.
Las medidas anunciadas por el gobierno han traído preocupación y desaliento en la población cubana. No obstante, mientras crece la incertidumbre del pueblo, Miguel Díaz-Canel sigue diciendo que van a triunfar y a vencer.
En recientes recorridos por varias provincias cubanas, el gobernante habló de la necesidad de explicar a la gente las nuevas medidas económicas, que muchos auguran que agravarán aún más la situación de las familias cubanas.
Incluso, ha llegado a pedir propuestas a la población, en una manifestación de desespero. “El que crea que hay otras cosas con las que podamos mejorar el país, lo hacemos. Necesitamos que en 2024 cambie la situación que hemos vivido en los últimos tres años, por las razones que ustedes saben", dijo en Ciego de Ávila recientemente.
Por último, ha llegado a catalogar las medidas como “el camino definitivo a la prosperidad”.
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