El régimen volvió a sacar a la palestra el tema de la eutanasia en Cuba, asegurando que sigue estando penada por la ley, a pesar de que ahora se permiten las "determinaciones sobre el fin de la vida".
Este delicado y complejo tema, fue manejado con pinzas por los representantes del gobierno para la aprobación de la nueva Ley de Salud en el Segundo Período Ordinario de Sesiones de la X Legislatura de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP).
El medio oficialista Girón entrevistó a la Dra. Taymí Martínez Naranjo, diputada y directora del Hospital Provincial Faustino Pérez, de Matanzas, quien aseguró que "el Código Penal cubano no incluye la eutanasia como categoría jurídica".
Martínez advirtió que "la persona que pueda inducir, facilitar o colaborar con poner fin a la vida de otro ser humano incurriría automáticamente en un posible hecho delictivo" en Cuba.
Reiteró que en el artículo 159.1, de la nueva Ley de Salud, se reconoce el derecho de las personas a acceder a una muerte digna mediante el ejercicio de las determinaciones para el final de la vida.
En su criterio, tales determinaciones son varias. "No es solo hacer un proceder que finalice la vida. Aquí se incluye: la limitación del esfuerzo terapéutico, los cuidados continuos o paliativos y los procederes válidos que finalicen la vida como tal", dijo la médico.
Especificó que las "determinaciones" están dirigidas a "personas con enfermedades crónicas degenerativas o irreversibles con un sufrimiento intratable, que se encuentren en fase agónica o terminal de vida, o que hayan sufrido lesiones que les coloquen en esta condición".
No se trataría solo de pacientes oncológicos, sino también personas con otras enfermedades, como las degenerativas neurológicas.
"No podemos ver esto como un proceso lineal hacia la muerte, es un camino con todo un tratamiento que debe tener una persona antes de llegar al final", dijo Martínez.
La doctora reconoció que hay "varios conceptos dispersos". Señaló que "quizás las personas se centran solo en lo relacionado con poner un medicamento para dar fin a la vida, algo polémico incluso para los profesionales de la Salud. Por eso se decide que en esta Ley no quede aprobada la implementación de estos procederes".
Insistió en que la aplicación de la eutanasia "será regulada en una ley específica, cuando se determine por el Ministerio de Salud Pública que para ello están creadas las condiciones, tanto desde el punto de vista teórico, de consenso, como material, porque lleva un aseguramiento".
En su criterio, la nueva normativa deberá establecer quiénes son los profesionales que aplicarán estas acciones y la decisión del médico debe ser respetada porque puede estar de acuerdo con hacerlo, o no.
La ambigüedad en el uso del término "determinaciones" en la nueva Ley de Salud, causa polémica entre la población cubana.
En la sesión de trabajo de la Asamblea Nacional, donde se realizó la aprobación de la Ley de Salud, el presidente de la Sociedad Cubana de Derecho Civil, Leonardo Pérez, informó a los delegados la sustitución del término eutanasia en el texto para su aceptación.
"Se evitan términos como el de eutanasia en la expresión de la norma jurídica y se utiliza el plural, que es lo importante, determinaciones", señaló Pérez.
La solapada aprobación de la eutanasia en Cuba llegó con la aguda crisis en el sistema sanitario. En medio de una fuerte escasez de medicamentos, de insumos médicos y hasta carencia de profesionales de la salud.
La situación es tan precaria en el país, que mueren a diario personas con enfermedades que son prevenibles, porque no hay en los hospitales los recursos mínimos para hacer frente a los tratamientos que se requieren.
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