El humorista Ulises Toirac afirmó que las recientes protestas ocurridas en Cuba son la consecuencia lógica tanto de la crisis como de la falta de esperanzas del pueblo, y pidió al gobierno resolver la situación.
Tras enterarse de las manifestaciones en Santiago de Cuba, Ulises aseguró que ya las esperaba.
"Es una situación económica extrema la de un número cada vez más grande de personas sin que se avizore un cambio drástico (el que necesitaría) en el rumbo que nos pueda encaminar con algún mínimo de esperanzas", escribió en su perfil de Facebook.
"Más grave que la falta de esperanzas es la ausencia de avizorarla en el futuro", añadió.
El comediante aclaró que no está incitando a nadie ni llamando a nadie a la violencia, ya que la detesta y la considera solo como último y desesperado recurso.
"No es mi rol 'calentar' o ganarme likes a costa de la violencia. Si algo hago es un llamado es a las autoridades a tener en cuenta la desesperada situación de las familias. Esa gente en la calle es pueblo. Es la tía, el hermano, la sobrina, el abuelo, la cuñada. Pido perspectiva y ecuanimidad", recalcó.
"Ojalá las cosas no se salgan de control de una manera catastrófica. Ya fuera de control están. Hace rato", concluyó.
En otra publicación, Toirac describió "con todo el sarcasmo" la supuesta tranquilidad en las calles, en evidente burla a lo que suelen hacer los perfiles del régimen en Internet siempre que hay protestas.
"No pasa na', señores. Hay caras sonrientes en la calle, una madre carga alegremente a su hija, los escolares cantan camino a las escuelas y se respira un bienestar duradero y generalizado", describió con ironía.
"Esas son las orientaciones. Reto cumplido", afirmó.
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