La niña cubana Amanda Lemus Ortiz, sometida a un trasplante de hígado el 15 de marzo pasado, tuvo que volver al salón de operaciones el lunes pasado para una nueva cirugía.
Según la activista Lara Crofs, se trato de una pequeña intervención para colocarle nuevamente un catéter con drenaje y stent en el conducto biliar, que se estaba dilatando.
"Los médicos explican que la dilatación del conducto se debe a la cantidad de antibiótico a la que la niña sigue siendo sometida, debido a bacterias resistentes que contrajo estando en Cuba", explicó en Facebook.
Lara detalló que dentro de 15 días se le hará una prueba de contraste a la pequeña para ver cómo está funcionando el conducto a partir del catéter.
"La niña salió perfectamente del postoperatorio una vez más. Amanda y sus padres tienen una fuerza enorme. Sobrevivir a todo lo que han tenido que pasar, ha sido épico", recalcó.
A pesar de su evolución, los especialistas advierten que la recuperación de la menor aún puede tardar meses. La causa de todas las recaídas que ha presentado en estos dos meses es el grave deterioro físico con el que llegó al Hospital Universitario La Paz, en Madrid.
"La familia y amigos de la niña nunca dejarán de sentir eterna gratitud en post de esta comunidad de cubanos que se unió para poder llevar tan humana y solidaria campaña", concluyó.
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