Los santiagueros se enfrentan a una situación crítica, con largas colas para acceder a servicios esenciales como la extracción de dinero en cajeros automáticos, el transporte público y la compra de gas licuado, lo que ha generado un creciente malestar entre la población.
El Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) alertó en su cuenta de Facebook el miércoles último que la situación se ha agravado en la urbe suroriental, dificultando el acceso de la ciudadanía a todos los servicios esenciales.
Lo más leído hoy:
“Largas colas para todo, para extraer dinero de los cajeros automáticos, para el transporte, para adquirir gas licuado”, apuntó la organización, denunciando el calvario que viven los santiagueros diariamente.
El video compartido muestra grandes aglomeraciones de personas en varios establecimientos del régimen, y también el disgusto que genera entre las personas.
El acceso al dinero en efectivo a través de los cajeros automáticos o las ventanillas de los bancos sigue siendo un grave problema para los habitantes de Santiago de Cuba, y el régimen no ha logrado encontrar una solución efectiva para esta situación.
En el banco ubicado en la intersección de Garzón y calle Tercera, en el reparto Santa Bárbara, las personas pasan la noche y madrugada haciendo colas para acceder al limitado efectivo disponible cuando el banco abre al día siguiente.
En junio último, un grupo de madres hicieron colas interminables en Santiago de Cuba para comprar el picadillo que el régimen vendió para los niños con motivo del Día de la Infancia que se celebró el 1 de junio.
El periodista Yosmany Mayeta informó en Facebook que residentes de las barriadas Chicharrones y Flores denunciaron el descontrol en la venta de picadillo en la tienda «Fin de Año», ubicada en el Parque de Chicharrones.
Archivado en: