Luis Ángel Ríos Cala (28 de marzo de 1978) tendrá que pagar una fianza de 100 mil pesos (312 USD al cambio) si quiere salir en libertad después de que la Policía de Aguacate, un poblado de Palma Soriano, en Santiago de Cuba, lo arrestara este lunes por haber comentado en un velorio que si en Aguacate hubiera justicia no habría tantos asesinatos.
Luis Ángel Ríos Cala estalló en el entierro de Arianni Céspedes, asesinada el sábado 14 de septiembre por su ex pareja delante de dos niños de 5 y 6 años, hijos de una vecina. En el momento del crimen, los menores estaban recogiendo almendras en el lugar de los hechos y fueron testigos cuando el asesino asestó una puñalada mortal a su víctima, perforándole un pulmón.
Fue en ese contexto de conmoción vecinal, debido a que Arianni Céspedes era muy querida en el pueblo, que Luis Ángel Ríos Cala lamentó que en menos de un año Aguacate hubiera enfrentado tres asesinatos: el de Dorka Velázquez, una niña de 15 años, degollada en noviembre de 2023 por un violador; el de su primo hermano, Jorge Luis Heredia Cala, asesinado tras descubrir un campo de marihuana en las inmediaciones de Aguacate y el de Arianni Céspedes, a manos de su ex marido.
Los tres asesinatos han tenido lugar entre noviembre de 2023 y septiembre de 2024 y en el caso de Jorge Luis Heredia Cala, primo del detenido al que le piden 100 mil pesos de fianza, el asesino está suelto por el pueblo. La Fiscalía lo dejó en libertad después de cinco meses de prisión preventiva, al creer su versión de que había matado accidentalmente a Jorge Luis Heredia Cala, cuando le tiraba una piedra a una lechuza, en un callejón oscuro del pueblo.
Las autoridades de Aguacate dejaron en libertad a Yacel Segura, alias Tatico, pese a que todo el pueblo, incluido Julián, el jefe de Sector, sabe que a Jorge Luis Heredia Cala lo mataron después de comentar que había encontrado una finca sembrada de marihuana.
Luis Ángel Ríos Cala, primo del fallecido, estalló al ver que lo que siempre había sido un pueblo tranquilo, de gente humilde, se ha convertido en un pueblo silencioso, en el que la gente teme hablar y salir de noche: un pueblo inseguro.
Las autoridades de Aguacate han mostrado una agilidad en el caso de la protesta cívica de Luis Ángel Ríos Cala, que no han tenido a la hora de investigar la propiedad del campo de marihuana y las verdaderas razones por las que mataron a Jorgito Heredia Cala. En el pueblo, dos fuentes distintas, han asegurado a CiberCuba que ha habido sobornos y corrupción en este caso. Ninguna de las dos ha aportado pruebas. Sí han comentado la sospecha de que el suegro de Tatico, el señor Julio A. Cuevas Pacheco, haya pagado para silenciar a los testigos que vieron a Tatico con "Hombre" matar a Jorgito Heredia. Hoy nadie sabe nada ni se acuerda de nada.
El caso aún no ha sido juzgado, pero el criminal está en la calle. Luis Ángel Ríos Cala tendrá que pagar 100 mil pesos si quiere volver a pisarla.
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