Crisis del agua en Cuba: "Dos tanques de 55 galones cuestan 700 pesos"

Cubanos afectados por la crítica escasez de agua en varias provincias de la isla denunciaron que mientras los salideros aumentan en las calles ellos deben pagar hasta en 700 pesos por dos tanques de 55 galones.

Los residentes en Trinidad, municipio de la provincia de Sancti Spíritus, afirmaron que la situación es crítica para miles de familias en esa localidad turística.

Allí dos tanques de 55 galones cuestan entre 600 y 700 pesos, mientras que una pipa de agua puede superar los 3.000 pesos, explicaron.

Maritza, residente en la calle Fidel Claro, lleva hasta dos meses sin recibir el servicio, pero a pocas cuadras de su hogar, un salidero deja que el agua se desborde por la calle casi a diario, declaró al portal oficialista Cubadebate.

“Es frustrante ver cómo se pierde el agua frente a mi casa mientras yo tengo que buscar alternativas para sobrevivir”, comentó.

El municipio enfrenta su crisis más grave debido a la rotura de seis equipos de bombeo, lo que ha afectado a más de 4.000 habitantes, incluyendo las zonas altas de la ciudad, la Península de Ancón y comunidades como Manaca y La Chispa, en Topes de Collantes.

Este mismo miércoles trascendió que una avería dejó sin agua a la cabecera provincial de Sancti Spíritus y a Cabaiguán.

Pero la situación también afecta a otras provincias como La Habana. La semana pasada la periodista Maya Quiroga denunció en Facebook un enorme salidero de agua en la intersección de las calles Línea y 10, en el Vedado, en medio de una aguda crisis de suministro de agua potable que afecta a la capital.

En marzo de 2023, el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INRH) reconoció que existen más de 4,000 salideros en todo el país, de los cuales más de 2,000 se encuentran en la capital.

A pesar de las declaraciones oficiales de que se está trabajando para resolver estos problemas, los salideros y las interrupciones en el suministro de agua continúan afectando a cientos de miles de personas: solo en La Habana más de 300 mil residentes dependen de pipas para abastecerse de agua potable.