La situación energética en Cuba continúa deteriorándose, afectando a los cubanos debido a un déficit de generación que alcanzó los 1,595 MW durante el horario pico.
La Unión Eléctrica de Cuba (UNE) informó en un comunicado oficial que la disponibilidad de generación al inicio del día era de apenas 1,550 MW, frente a una demanda de 2,480 MW, lo que ha provocado cortes de electricidad generalizados, especialmente en la región centro-oriental del país.
Lo más leído hoy:
Según el reporte, el déficit energético ha persistido durante 24 horas consecutivas, con afectaciones que se agravaron en la noche del 31 de octubre. La situación se ha visto empeorada por varias unidades generadoras fuera de servicio debido a averías y falta de combustible. Entre las plantas afectadas están la CTE Mariel, la CTE Santa Cruz, la CTE Cienfuegos y la CTE Nuevitas, que permanecen con sus unidades paralizadas. La UNE indicó que se prevé una disponibilidad para el horario pico de apenas 1,675 MW frente a una demanda estimada de 3,200 MW, lo que resulta en un déficit proyectado de 1,525 MW.
La crisis energética actual no es un hecho aislado. Ayer, el ministro de Energía y Minas, Vicente De La O Levy, declaró que el sistema eléctrico cubano “se encuentra frágil” debido a problemas logísticos y condiciones marítimas adversas, que dificultan el abastecimiento de combustible. Aunque descartó un colapso total, advirtió sobre la falta de estabilidad en el suministro de energía, afectado además por la antigüedad de las instalaciones y la falta de mantenimiento regular.
Esta fragilidad ha alarmado a la ciudadanía, que teme un nuevo colapso energético similar al vivido recientemente, cuando el país sufrió apagones masivos. En redes sociales, los cubanos expresan su frustración y denuncian una distribución desigual de los apagones, observando que La Habana parece verse menos afectada que otras provincias. La región centro-oriental, en particular, ha sufrido las mayores afectaciones en los últimos días, generando críticas y una creciente sensación de malestar social.
Con este pronóstico, la UNE prevé un escenario complicado para las próximas jornadas, sin señales de una pronta mejora. Las condiciones actuales indican que el déficit podría continuar, y, de mantenerse la situación, las afectaciones en la vida cotidiana de los cubanos se intensificarán. La UNE y el Ministerio de Energía y Minas no han informado sobre un plan de contingencia claro, limitándose a reportar la situación y los esfuerzos por reincorporar algunas unidades generadoras en las próximas horas.
Mientras tanto, los cubanos intentan adaptarse a un nuevo periodo de apagones que amenaza con prolongarse, a la espera de una solución definitiva que permita al país superar esta crisis energética crónica.
Archivado en:
