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La victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos ha generado un repunte significativo en los mercados financieros.
Wall Street abrió la jornada en máximos históricos, impulsado por las promesas de la nueva administración republicana de reducir impuestos corporativos, implementar aranceles favorables y promover la desregulación.
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Esto ha beneficiado especialmente a sectores como la banca y las empresas de pequeña capitalización. Según Reuters, el índice Russell 2000, que agrupa a compañías de menor tamaño, subió un 4,8%, alcanzando su nivel más alto en casi tres años.
Uno de los mayores beneficiados fue Tesla, cuyas acciones aumentaron un 12,5% tras el anuncio de Trump de nombrar a Elon Musk, su CEO y uno de sus principales aliados durante la campaña, como jefe de una comisión de eficiencia gubernamental.
Este respaldo consolidó la posición de Musk en la administración entrante y añadió valor a Tesla frente a otros fabricantes de vehículos eléctricos, que sufrieron caídas debido a las declaraciones de Trump sobre la posible eliminación de los créditos fiscales para vehículos eléctricos.
El mercado de criptomonedas también experimentó un aumento drástico. Bitcoin alcanzó un máximo histórico de 75,000 dólares, con un incremento del 9%, impulsado por la promesa de Trump de convertir a Estados Unidos en un centro global de criptomonedas.
El cambio de postura de Trump sobre el sector, de crítico a defensor, ha generado optimismo en la industria, que espera una mayor aceptación regulatoria bajo su mandato. Ether, otra criptomoneda popular, también se revalorizó en un 6%.
La victoria de Trump ha tenido repercusiones globales. El dólar subió un 1,5% frente a otras monedas importantes, y el bono del Tesoro a 10 años aumentó su rentabilidad a 4,46%, niveles no vistos desde julio.
Estos movimientos reflejan la expectativa de que el enfoque proteccionista de Trump aumente la inflación, limitando la capacidad de la Reserva Federal para bajar los tipos de interés en el futuro.
En Europa, los mercados reaccionaron de manera mixta. Según El Mundo, el índice español Ibex 35 cayó un 2%, afectado por el impacto en valores de energías renovables, ya que Trump ha propuesto desmantelar políticas de cambio climático de la administración anterior.
Al mismo tiempo, sectores como la defensa y la banca estadounidense aumentaron sus valores, anticipando menos restricciones regulatorias en la era Trump.
En general, la victoria de Trump parece estar configurando un entorno económico que favorece sectores industriales, energéticos y de criptomonedas, mientras que los sectores dependientes de políticas medioambientales podrían enfrentar desafíos significativos en los próximos años.
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