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Durante 53 años, Aurelio de la Vega ha estado entre los más importantes y reconocidos compositores cubanos fuera de la Isla y, sin embargo, en la "lista negra" el régimen. Las cosas parecen haber cambiado en las últimas semanas. Tras su reciente nominación a los Grammy Latinos en la categoría de Composición Clásica Contemporánea, su nombre ha aparecido en los medios oficiales, y una página en internet del Gobierno incluso lo entrevistó. No ha ocurrido lo mismo con otros músicos también nominados como Paquito D'Rivera y Arturo Sandoval. Aurelio de la Vega "está considerado junto a Leo Brouwer uno de los dos compositores cubanos vivos más importantes del momento en la llamada música culta o clásica", dijo el sitio Cubanow.net, que se presenta como una "revista digital de arte y cultura". Lo calificó de "cubano ilustre" y resaltó su trayectoria. De la Vega, de 86 años de edad, compositor, pianista y profesor emérito de la California State University, Northridge, ha escrito numerosos ensayos sobre música contemporánea y más de 70 composiciones para orquestas sinfónicas y conjuntos de cámaras. Su obra también abarca música electrónica, ciclos de canciones, piezas corales, partituras para piano y otros instrumentos. "He sido persona non grata en Cuba durante 50 años", dijo De la Vega a Los Angeles Daily News. "Me fui de Cuba porque no estaba de acuerdo con su política. En un estado totalitario, eso es lo que pasa. A nadie se le mencionaba mi nombre. Yo no existía", agregó. "Es muy extraño", afirmó sobre el reconocimiento repentino. "En cierto modo, me alegro. Significa que hay cierta apertura, algún cambio. Basta ya sinsentidos". Nacido en La Habana, De la Vega ganó rápidamente un sitio en la comunidad artística de la Isla y Estados Unidos. En Cuba trabajó con las mejores orquestas y escuelas de música, y fue agregado cultural en el Consulado de La Habana en Los Angeles. Un año después de la llegada al poder de Fidel Castro, el compositor se unió al San Fernando Valley State College. Más tarde, fundó un laboratorio de música electrónica que estuvo entre los primeros en América del Norte. Después de retirarse, en 1993, el profesor de música y reconocido ensayista continuó ganando premios por sus composiciones, interpretadas por las principales orquestas del mundo. En 2000, fue incluido en el compendio de la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos sobre los grandes de la música de todos los tiempos. De la Vega, quien no ha vuelto a la Isla desde que partió en 1959, dijo que espera que la juventud cubana pueda conocer su música. "Es muy bonito para mí ser reconocido y que los más jóvenes sepan que existo", afirmó. "Me gustaría ver a la nueva generación de músicos y comunicarme con ellos". "Podemos (finalmente) establecer puentes. Nunca me he olvidado de mi patria. Es algo que está en mi corazón para siempre", agregó. Fuente: Diario de Cuba
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