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La Sony Music Entertaiment y la Empresa cubana de Grabaciones y Ediciones Musicales (EGREM) firmaron, ayer en La Habana, un acuerdo de licenciamiento global que permitirá la distribución a escala mundial de más de 20 mil grabaciones de música cubana.
Producciones fonográficas de Irakere, Los Van Van, Bola de Nieve, Ibrahim Ferrer y Omara Portuondo, entre otros muchos músicos de la isla, volverán a la vida gracias este acuerdo que se extiende por varios años, anunció la revista Billboard.
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“Nosotros estamos encantados de hacer asociación con la EGREM para compartir por primera vez uno de los mayores y más aclamados catálogos de música cubana con los fans alrededor del mundo”, dijo en un comunicado el director ejecutivo de Sony Music Entertainment, Doug Morris.
Dada que Sony es la primera multinacional que tiene acceso al portentoso catálogo cubano, Morris aseguró que este “acuerdo ayudará a expandir el conocimiento y aprecio internacional de la cultura cubana, el rico patrimonio musical cubano y sus muchos maravillosos artistas.”
El contrato, firmado por Afo Verde, Presidente de Sony Music para Latinoamérica, España y Portugal, y el Director General de la EGREM, Mario Escalona Serrano, permitirá distribuir grabaciones de audio y video producidas desde la década de los 60.
El Presidente Internacional de Sony, Edgar Berger, también acudió al acto de la firma que tuvo lugar en el Estudio Areito 101, una de las sedes discográficas de la EGREM y legendario estudio de grabación desde los años 40.
“Sony Music se honra con llevar esta música icónica -que representa más de cinco décadas de cultura cubana-, a todos los rincones del mundo”, expresó Berger durante el acto protocolar. De igual forma admitió sentirse entusiasmado por introducir a los talentosos artistas cubanos al escenario global que tanto merecen.
Por su parte, Verde añadió que el “gran tesoro” de la música cubana que puso la EGREM en sus manos, se encontrará prontamente disponible en todas las plataformas posibles de música y video.
El acuerdo conjunto, que logró sellar un período de negociaciones de dos años, se realizó a pesar de las serias restricciones aún existentes entre Cuba y EEUU, por lo que estuvo sujeto a muchos requerimientos.
La excepción para “materiales informativos” que contemplan las sanciones de la Oficina para el Control de Activos Extranjeros de EEUU (OFAC), fue el nicho que aprovecharon los ejecutivos de Sony para arribar a las transacciones con la EGREM.
Tal acápite aplica a la música y otros trabajos artísticos, con la intención de promover el libre movimiento de información y de expresiones artísticas para el pueblo cubano.
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