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El número de ciudadanos cubanos que han inmigrado a Estados Unidos en los últimos meses ha ascendido drásticamente luego del 17 de diciembre, fecha que marca un giro en las relaciones entre los dos países, según datos publicados hoy por el Centro Pew, informa EFE.
De octubre de 2014 a junio de 2015 entraron en EE.UU. 27.296 personas de origen cubano, de acuerdo con cifras facilitadas al Centro Pew por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos; lo cual supone un incremento del 78 % con relación al mismo periodo del año pasado.
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Entre enero y marzo de 2015 se encuentra el número más significativo de personas procedentes de Cuba que entraron a los Estados Unidos. En ese entonces, 9.371 cubanos llegaron a EE.UU., más del doble de los 4.296 que lo hicieron en los tres primeros meses de 2014. Del mismo modo, se incrementaron las entradas a través de Texas, México en un 66 %.
Sin embargo, el mayor incremento en porcentaje se produjo en Miami, donde la cifra de entradas de cubanos pasó de 2.992, en los nueve primeros meses del año fiscal 2014, a 7.167 en el presente ejercicio, que equivale un incremento superior al 100 %, asegura la publicación.
La Ley de Ajuste cubano, que data de 1966, permite que la migración cubana sea bien acogida en territorio de los Estados Unidos, otorgando beneficios a los ciudadanos cubanos para la residencia en el país, por encima del resto de los migrantes latinoamericanos y caribeños.
Por otro lado, la Guardia Costera estadounidense capturó en el mar a 2.927 migrantes cubanos en el año fiscal 2015 quienes fueron devueltos tal como exige la política “Pies secos pies mojados”.
Cuba y Estados Unidos continúan normalizando sus relaciones, cuya evidencia más rotunda en la aperturas de sendas embajadas en La Habana y Washington. La última noticia trascendente sobre este asunto fue el encuentro en Naciones Unidas de los presidentes Barack Obama y Raúl Castro, y el pedido, del primero, del cese del embargo a Cuba, política que el mandatario estadounidense reconoce como fallida.
Foto: Bryan Ledgard
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