Vídeos relacionados:
Elliot Erwitt es a sus 87 años uno de los fotógrafos más legendarios de la afamada agencia Magnum, fundada por Robert Capa. El que captara en 1964 una de las fotografías más famosas de Che Guevara y Fidel Castro volvió a Cuba el pasado mes de Octubre a la mayor de las Antillas para documentar la vida de una isla en pleno cambio y donde encontró a la gente más cariñosa y generosa del Caribe, según el mismo confesó.
Tras abandonar la isla, el fotógrafo viajo a Amsterdam para apadrinar una muestra exprés organizada en su honor.
Lo más leído hoy:
“Mi enfoque es el mismo de entonces. Sigo revelando en blanco y negro y sin cámaras digitales, pero sí noto el cambio cubano. Están de moda y les gusta posar. Creo que a Cuba siempre la vemos en color y cayéndose a pedazos. Y no es así. Intento que mi Habana sea más personal”, aseguró Erwitt en la la Feria Internacional de Fotografía de Ámsterdam.
Además, Erwitt aprovechó su visita a Cuba el pasado mes para apoyar y colaborar en un proyecto en colaboración con el ron Habana Club llamado “The Elliott Erwitt Havana Club 7 Fellowship” y que persigue apoyar a nuevos fotógrafos.
Esta iniciativa de formación académica se lanzó oficialmente el pasado 1 de noviembre, momento que el fotógrafo aprovechó para presentar al gran público las (cerca de cuarenta) imágenes de su Cuba revisitada.
Hijo de inmigrantes rusos, Elliott Erwitt, nacido en París en 1928, estudió fotografía en Los Ángeles y Nueva York y ganó su primer premio cuando estaba en el ejército.
Fue contratado por Capa para la agencia Magnum en 1953 y su especialidad es “estar en el lugar adecuado en el momento oportuno por casualidad", como el mismo define.
Sus retratos de Marilyn Monroe, Richard Nixon, Simone de Beauvoir, Che Guevara o Fidel Castro son legendarios. El rostro de Jacqueline Kennedy, con velo negro, en el funeral de su esposo, es uno de los más reproducidos de la historia.
Foto: Alfred Weidinger - Flickr: Elliott Erwitt in the Westlicht Museum of Photography, Vienna
Archivado en: