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La extrema sequía en la provincia de Santiago de Cuba se mantiene en la presente temporada. Según Janet Triana Cobo, delegada de Recursos Hidráulicos en dicha provincia, la situación ha empeorado.
La causa radica en las escasas precipitaciones en el período húmedo, que comprende los meses de enero a octubre. 308 millones de metros cúbicos de agua menos, en sus 11 embalses, es el resultado de la temporada. Se acumula entonces solo el 29 por ciento de la capacidad total de las presas de Santiago.
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Otro hecho alarmante es que por primera vez la presa Parada, que abastece a la capital provincial, llegó a “volumen muerto”, lo que afecta a más de 32 mil habitantes y 26 industrias, informa la ACN.
Triana Cobo precisó algunas medidas a tomar en las actuales circunstancias; una de ellas es la reprogramación de ciclos de entrega, que anteriormente eran de seis, a 16 días. Además los 299 puntos críticos de la ciudad serán abastecidas con pipas.
De manera similar, se ejecuta un programa de mantenimiento y sustitución de válvulas. Por otra parte, las industrias y empresas consideradas como altos derrochadoras deberán ajustarse a las normas mediante un uso racional y el ahorro, precisa la funcionaria.
Las anteriores medidas se unen a otras tomadas hace un tiempo atrás para paliar la sequía en dicho territorio, entre las cuales sobresale la construcción de una planta potabilizadora de agua de mar, frente a la ensenada de Boca de Cabaña, a unos 20 kilómetros de Santiago por la carretera que conduce a la playa de Mar Verde.
Foto: Tomás F. Sepúlveda
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