Acompañado por un elenco de grandes intérpretes como Enrique Molina, Vladimir Cruz, Amarilys Nuñez, Osvaldo Doimeadiós, y otros más jóvenes pero reconocidos actores como Carlos Enrique Almirante, Héctor Medina y Miriel Cejas, entre otros, Gerardo Chijona condujo a buen puerto La cosa humana, que ahora llega a las salas de estreno en Cuba, y que cuenta con otros colaboradores ilustres como Edesio Alejandro en la banda sonora y Raúl Pérez Ureta en la dirección de fotografía.
A diferencias de otras muchas comedias cubanas, el referente de La cosa humana no es la vida, sino el arte, el cine y la literatura, y el reto del director consiste en hacer reír al espectador a partir de personajes atípicos, y de un humor diferente al habitual, un poco en la línea de ciertas comedias norteamericanas, pues Chijona siempre ha sido admirador de Billy Wilder, Howard Hawks, y sobre todo de Woody Allen.
Especializado en comedias negras, o con un fuerte dejo crítico y amargo, como Adorables mentiras (1991), Un paraíso bajo las estrellas (1999) y Perfecto amor equivocado (2003), Gerardo Chijona también ha dirigido filmes de variados estilos, y de muy diferente acogida entre el público y la prensa, como Esther en alguna parte (2013) y Boleto al paraíso (2010), esta última coescrita por el director con el escritor Francisco García. El dúo repite la experiencia en La cosa humana.
Según relató Chijona a la revista Cuba Contemporánea: “Realmente Francisco García y yo empezamos a escribir La cosa humana antes que Boleto al paraíso. A él le habían robado, y entre todas las cosas que se llevaron había un cuento que apareció meses después en un concurso provincial. Yo quería hacer una película inspirada en Balas sobre Broadway, una comedia muy sofisticada de Woody Allen. Luego Francisco emigró a Canadá, y luego retomamos La cosa humana, e intentamos darle forma a todo el compendio de citas, referencias y homenajes que incluye la película".
La cosa humana puede entenderse, entonces, como una comedia policiaca intelectualizada, repleta de citas, referencias y homenajes entre los cuales se pueden reconocer señales de El padrino. Además hay un reconocimiento explícito al cineasta Daniel Díaz Torres, amigo y colega muy cercano a Chijona.
La artificialidad de algunas expresiones de los personajes dificultó el trabajo de los actores, pues a veces se debía manejar la dicotomía entre la marginalidad y la ilustración, porque más allá del acercamiento mismo al mundo de la delincuencia y la marginalidad, se intenta revelar la ética y la complejidad de la condición humana, algo muy presente en todas las películas de Chijona.
Presentada con notable éxito de público en la más reciente edición del Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano de La Habana, La cosa humana logró comunicarse con el público a partir de su humor intelectual y paródico.
El próximo proyecto de Gerardo Chijona se titula Los buenos demonios, y se trata de un proyecto que Daniel Díaz Torres dejó inconcluso, y que estaba escribiendo con Alejandro Hernández, un alumno cubano de la Escuela Internacional de Cine y TV de San Antonio de los Baños que se estableció en España y se ha convertido en importante guionista en aquel país.
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