La empresa petrolera venezolana PDVSA compró a EEUU 550.000 barriles de crudo a través de uno de sus terminales en el Caribe. Esta compra se convierte en la primera compra en Latinoamérica de petróleo procedente de ese país desde que fue levantada la veda para con las exportaciones hace un año.
Venezuela, socio de la OPEP (organización de países exportadores de petróleo) ha tenido problemas de ingresos en los últimos meses debido a los precios del crudo cada vez más bajos, lo que afecta a los ingresos por exportaciones. La petrolera venezolana ha tenido en el último año problemas de pago con sus proveedores, muchos de los cuales se negaban a descargar petróleo antes de recibir los pagos.
El proveedor estadounidense que vendió a Venezuela fue Citgo Petroleum, la unidad de refinación de PDVSA en Estados Unidos, que adquirió un cargamento de crudo que fue recibido la semana pasada en una terminal operada por PDVSA en Curazao, tras ser embarcado en la costa estadounidense del golfo de México.
Además de a Estados Unidos, Venezuela también ha importado desde 2014 crudos desde Angola, Nigeria y Rusia, a través de ofertas mensuales lanzadas en el mercado abierto y un contrato de suministro.
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