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El año pasado ocurrieron en Cuba 506 incendios forestales, que dañaron cerca de seis mil hectáreas (5.788). Las zonas más castigadas fueron Pinar del Río, Matanzas, Camagüey, Holguín y Granma. Durante el pasado año 2015, fuertemente azotado por la sequía y año más cálido desde 1951, las pérdidas por incencios ascendieron a 34 millones de pesos.
Para este 2016, en cambio, se espera que el influjo del fenómeno climatológico de El Niño -que ha elevado los valores medios de precipitaciones en período de seca-, reduzca los valores de incendios con respecto a los del año anterior.
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Raúl González Rodríguez, jefe del Departamento de Gestión y Manejo del Fuego, de la Jefatura Nacional del Cuerpo de Guardabosques de Cuba indicó a medios cubanos que las previsiones para este 2016 esperan que ocurran 209 y 254 incendios, y que se afecten de promedio unas 2.967 hectáreas.
Si durante los dos primeros meses del año 2015 ocurrieron 61 siniestros de este tipo que dejaron afectacciones de 250 hectáreas en casi todas las provincias, para similar período del 2016 solo han sido reportados por el Cuerpo de Guardabosques 6 incendios forestales (uno en Mayabeque, Las Tunas y Granma, y tres en Matanzas).
La zona oriental, donde existen casi 45 municipios con alto riesgo de sequía, casi no se beneficiará de las aguas de El Niño, por lo que mantiene una alta probabilidad de ocurrencia de evento de esta naturaleza.
Según pronósticos de los expertos una de las principales causas de los incendios forestales para este 2016 serán las negligencias, relacionadas bien con la circulación de vehículos sin 'matachispas', bien con las quemas para diferentes fines, los fumadores irresponsables o los pescadores-cazadores furtivos.
“De los siniestros acontecidos en la etapa precedente, el 96 por ciento de las causas obedecen a acciones humanas y solo se lograron identificar a los autores de 13, de ellos seis fueron multados. Además, durante el período enero-mayo se impusieron 2 964 multas relacionadas con el uso del fuego sin autorización y el incumplimiento de medidas preventivas”, indicó a la prensa cubana Raúl González Rodríguez, jefe del Departamento de Gestión y Manejo del Fuego, de la Jefatura Nacional del Cuerpo de Guardabosques de Cuba.
González Rodríguez, quien recalcó la importancia de labores educativas y de divulgación para disminuir las acciones negligentes e irresponsables con los bosques y ecosistemas cubanos, indicó que la práctica habitual del Cuerpo de Guardabosques de actuar cuando se alcanzan las 5 hectáreas de afectación se cumplió el pasado año para el 81% de los incendios.
Durante el último lustro se ha percibido una tendencia al alza en los incendios forestales en la Isla, donde se reportaron como promedio 329 incendios anuales. Es por ello que toda acción que contribuya a revertir el signo de este comportamiento (tanto mejora en los accesos a las zonas afectadas como en la responsable actuación de los ciudadanos) contribuirá a proteger el rico patrimonio forestal cubano, los suelos y sus ecosistemas.
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