Foto: ESPN
A las 9.50am de esta mañana, Jeff Goldberg en el noticiero de ABC News relataba que “el pelotero de origen cubano Héctor Olivera habría sido arrestado por una disputa doméstica.” Veintiocho minutos más tarde, la Major League Baseball y la oficina del Comisionado de Beisbol, levantaban una sanción administrativa al joven. Todo en espera de una investigación más detallada sobre el asunto. Pero ya se sabe todo. O al menos, “casi todo.”
La víctima – una mujer – había llamado bien temprano en la mañana al 911 (6.51am) para informar que había sido “asaltada.”
Tenía marcas en el cuerpo y fue llevada al hospital. Olivera fue localizado y arrestado en el mismo lugar dónde sucedió todo: en el Hotel Ritz Carlton de Arlington, en Washington. Dos horas después del arresto, y en espera de nuevos detalles, la policía aún no le había imputado cargos.
Fuentes dentro del departamento, han informado que Olivera, tendrá que presentarse ante un juez el próximo miércoles, y que los cargos que seguramente enfrentará son los de delito menor y asalto.
La policía además informó que tanto la víctima, como el agresor se conocen perfectamente aunque no revelaron más detalles sobre el grado de relación entre ambos.
El equipo de los Bravos de Atlanta, para el cual juega Olivera, expresó en un comunicado que:
“Nos sentimos profundamente decepcionados con lo ocurrido. Continuaremos recabando información y tan pronto tengamos en la mano todos los detalles, emitiremos un comunicado al respecto. Por el momento la MLB y el Comisionado han decidido “suspender” temporalmente a Olivera de cualquier presentación. “
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