El naciente sector privado de Cuba, impulsado en 2011, gana apresuradamente mayor terreno conforme al paso de los años. Prueba de ello resulta en la variedad y cantidad de pequeños negocios enfocados a los servicios gastronómicos y fundados en su mayoría por cubanos repatriados, así como las iniciativas de jóvenes emprendedores en la búsqueda por subvertir la brecha tecnológica y de conexión en la isla.
Con vínculos que van desde lo comercial a lo simplemente tributario, este segmento empresarial emergente coexiste con el Estado cubano y se las apaña para subsistir de manera inteligente y profesional en un entorno históricamente hostil a las formas no estatales de la economía.
La línea de trabajo por cuenta propia parece adueñarse también de propuestas de mayor envergadura hasta hace poco llevadas a cabo bajo instancias gubernamentales, las cuales afrontaban directamente determinadas tareas o subcontrataban a empresas extranjeras para este propósito.
Hablamos, por ejemplo, del sector de la construcción, desde donde resalta Verticales ABZ, una pequeña empresa privada que desafía los convencionalismos de la isla, así como el vértigo que impone el trabajo que vienen realizando sus fundadores desde hace tan solo cuatro años.
Este grupo de jóvenes emprendedores conforman la primera compañía en Cuba avalada a nivel internacional para realizar proyectos integrales de remodelación, restauración y mantenimiento de exteriores (industrias, edificaciones y obras civiles) en lugares de altura, mediante la utilización de las técnicas de alpinismo y acceso por cuerdas.
Como aseguran desde sus redes sociales, para Verticales ABZ “no hay límites, no existen barreras, llegamos a todos los sitios”, espíritu que les ha llevado a participar en obras de rehabilitación de portentosos inmuebles de La Habana, entre los que figuran el Hotel Meliá Cohíba, el Hotel Parque Central y el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos.
El fundador de este temerario equipo, Rafael Leyva Cabrera, trajo a casa la certificación IRATA (Industrial Rope Access Trade Association), un sello de aprobación con reconocimiento internacional que acredita un ambiente de trabajo seguro para el acceso con cuerdas según sus directrices operacionales.
IRATA es la única asociación global de mercado en el sector de trabajo en altura y cuenta con empresas miembros en todos los continentes. Una certificación de este tipo, garantiza seguridad, formación, prácticas laborales y garantía de calidad en cada obra de la empresa avalada.
Con esas credenciales, Verticales no solo cuenta con todos los estándares internacionales y políticas de seguridad interna de la industria, sino que además ostenta equipos profesionales de primerísima calidad bajo las normas -también internacionales- CE y EN, UIAA y ANSI.
Dichos logros dan muestra de cómo, desde el plano profesional, se consolida en la isla un sector privado protagonizado por cubanos que no le temen a los retos y se niegan a permanecer al margen de la nueva dinámica que viene irrumpiendo en el panorama económico actual del país.
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