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A pesar de que la INTERNET en Estados Unidos es una autopista informativa a disposición de todos y a pesar de que una compañía como Carnival tiene toda la experiencia del mundo en la organización de este tipo de viajes por los siete mares, pasajeros de Fanthom, que viajaron a bordo del crucero Adonia desde el primero de mayo, y como cada semana a la "isla prohíbida", han expresado confusión acerca del modo en que la compañía ha organizado los tours, y sobre todo acerca de como "moverse" dentro de Cuba y qué hacer y comprar que no los afecte a su regreso a los Estados Unidos.
Según la nota "muchos (viajeros) se inscribieron en las excursiones organizadas por el barco, sin darse cuenta de que podrían haber creado sus propios itinerarios sin violar las reglas norteamericanas quienes aún limitan a los estadounidenses que visitan Cuba para ciertos tipos de actividades como intercambios culturales".
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Siempre en el más mínimo apego a la verdad, resulta hasta simpático - porque involucra a Cuba, un país donde las circunstancias a veces obligan a las leyes a funcionar de cabeza -, que haya existido tanta desorganización en un viaje que se venía preparando de antemano, pero hasta los propios funcionarios de la compañía han reconocido la confusión existente, que incluso, llevó a que se organizaran "tours al azar" entre los pasajeros, y a los que se quedaron fuera, se les ofreció la opción de "hagan lo que deseen", pero ninguno de ellos, que durante más de 50 años tuvieron prohibido viajar a Cuba, y que incluso aún ahora, al comprar el billete se les extendió una planilla para que explicaran bajo que puntos "calificaba su viaje a Cuba", supo que podía hacer, o dónde poder ir, sin temor por ejemplo de extraviarse. ¿Funciona la tecnología GPS en Cuba? ¿Puedo salir a caminar y el mapa de mi teléfono funciona? ¿Puedo comprar tabaco? ¿Ron?¿Qué cantidad? ¿Debo cambiar dólares en cuál moneda; en CUC o en Pesos? Lo que compre... ¿lo declaro a mi regreso?
Preguntas de este tipo pudieron surgir - y de hecho surgieron - durante este primer mes de viajes.
Tantas críticas obligaron a Tara Russell, quien lidera Fathom, a decir que se han "retocado algunos programas, que darían a los pasajeros más información, flexibilidad y personalización de las opciones de viaje."
Russell añadió que, las políticas de los Estados Unidos con respeto a Cuba "están cambiando todos los días," y que la empresa tuvo dificultades para adaptarse en el camino.
"Sería una locura pensar que todo habría sido perfecto. Estuvimos negociando hasta el último minuto', dijo.
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