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Triste se presenta el panorama para los cerca de 400 cubanos que se encuentran en el poblado de Turbo, en Colombia, esperando por una medida de gracia similar a la que las autoridades costarricenses y panameñas, brindaron en los meses pasados a los cubanos que llegaron a sus territorios en paso hacia los Estados Unidos. Esta vez, al parecer, no habrá bondad. No por parte de Colombia.
El director de Inmigración de Antioquia, Wilson Patiño, en entrevista concedida a Martí Noticias, dijo que “los cubanos deberán salir de Colombia”, y los que resistan serán deportados. O sea, no habrá puente aéreo, si no deportación.
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Patiño hizo clara alusión a aquellos que se encuentran desde hace ya más de 30 días “albergados” en una nave o bodega, de la cual no salen por temor a ser deportados.
El oficial de inmigración dijo que “este es un llamado importante; no habrá puente aéreo. Quienes lo deseen pueden ser llevador a la frontera con Ecuador (sitio por dónde ingresaron) o podemos facilitarles un salvoconducto para que se puedan mover por el país libremente; pero deben abandonarlo en el plazo que contempla el documento”.
Patiño explicó que a su gobierno le es imposible acceder a un reclamo como este, pues en Colombia, el delito de tráfico de migrantes está contemplado en el código penal y el gobierno no colaborará en ese sentido con los migrantes cubanos.
Patiño enfatizó que su gobierno, tiene el firme compromiso de erradicar este peligroso flagelo, que cada año se cobra la vida de centenares de personas. Dijo, que incluso en días recientes se le ha dado un duro golpe a los traficantes de personas, dejando a la luz un peligroso entramado de corrupción de la cual no está exenta hasta la policía del país.
“A nosotros lo que nos interesa es determinar quiénes están detrás de esta migración irregular y por supuesto quitarles los migrantes ilegales de las manos a traficantes ilegales para ponerlos a buen recaudo”, expresó.
Las malas condiciones, la desesperación, la incertidumbre ha hecho mella en los cubanos “anclados” en Turbo. Algunos han comenzado a salir y han sido detenidos y expulsados del país.
Los que están aún dentro, conocen que no habrá negociación, pero aún así no salen, pues saben que serán detenidos, y en algunos de ellos hay temor de que sean deportados a Cuba.
Algunos ya lo perdieron todo en Ecuador, y no tienen certeza en el regreso.
Otros, lo vendieron todo en Cuba, y ni siquiera tienen para comprar un ticket de bus en Ecuador. Ni siquiera saben dónde pueden ir. No conocen a nadie. Están perdidos, y este, parece ser un laberinto de una sola salida: la peor de todas.
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