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MEDICC (Medical Education Cooperation with Cuba) asociación sin fines de lucro fundada en 1997, le ha dado la bienvenida a la firma del acuerdo entre Estados Unidos y Cuba, que consideran abre el camino para la colaboración en salud.
Esta organización ha trabajado, desde su fundación, para mejorar la cooperación entre las comunidades de salubristas de Estados Unidos, Cuba y el mundo con el objetivo de lograr mejores resultados en salud y equidad.
Gail Reed que es la directora ejecutiva de Medicc ha expresado que: “Esta es una situación en la que ganan tanto los norteamericanos como los cubanos. Ahora estamos un paso más cerca de un futuro más seguro y más sano para los pueblos de ambos países,” “pero este también es sólo el primer paso. Esperamos que el Presidente Obama abra aún más la puerta a la cooperación facilitando programas conjuntos, de investigación y de desarrollo de medicamentos.”
El memorando de entendimiento que fuera firmado recientemente por la Secretaria de Servicios de Salud y Humanos Sylvia M. Burwell y por el Ministro de Salud Pública de Cuba, Dr. Roberto Morales Ojeda, “establece la coordinación a través de un amplio espectro de temas de salud pública, incluyendo la seguridad de la salud global, enfermedades trasmisibles y no trasmisibles, investigación y desarrollo, y tecnología de la información,” según expresa la declaración del HHS. Esta declaración también señala que Cuba y Estados Unidos tienen en común muchos temas sociales y problemas de salud como el envejecimiento poblacional y enfermedades como el cáncer, la diabetes y las enfermedades neurodegenerativas. Ambos países están también expuestos a las infecciones emergentes y a las enfermedades trasmitidas por mosquitos como el Zika y el dengue.
Medicc considera que además de este acuerdo, que sin dudas constituye un paso de avance, hay otras medidas que la administración Obama puede tomar de inmediato para acelerar la colaboración en salud que sin dudas beneficiarán a ambos pueblos.
En febrero pasado, MEDICC publicó un documento (White Paper) que relaciona las medidas que el Presidente Barack Obama pudiera tomar para eliminar los problemas del proceso regulatorio norteamericano a las innovaciones biotecnológicas y de otro tipo desarrolladas por Cuba así como algunas otras que suprimirían las dificultades para la creación de empresas mixtas entre entidades norteamericanas y cubanas en salud e investigación médica.
Las recomendaciones que ellos hacen se resumen en los siguientes aspectos:
-Que los productos farmacéuticos y médicos desarrollados por Cuba se sometan solo a las mismas rigurosas pruebas regulatorias por las que pasan los de otros países, eliminando los pasos extraordinarios que hoy existen y que los tratamientos médicos cubanos aprobados por Estados Unidos estén disponibles de forma rápida para los pacientes norteamericanos.
-Que las compañías farmacéuticas y de equipos médicos norteamericanas puedan incluir los hospitales y los centros médicos cubanos en sus ensayos clínicos, acelerando de forma potencial el proceso de aprobación de los nuevos productos norteamericanos al ampliar el grupo de participantes calificados para el ensayo.
-Que los norteamericanos puedan viajar a Cuba para recibir tratamiento médico.
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