Prohíben a periodistas "oficiales" cubanos colaborar con medios alternativos

La información ha llegado a este redactor por tres vías distintas. La medida supone "la muerte" para muchos que colaboran con Oncuba, Progreso Semanal y El Toque

 © Prohíben a periodistas cubanos colaborar con medios alternativos por ser antiéticos y contrarrevolucionarios
Foto © Prohíben a periodistas cubanos colaborar con medios alternativos por ser antiéticos y contrarrevolucionarios

Vídeos relacionados:

Este artículo es de hace 8 años

Dos periodistas jóvenes cubanos se han comunicado con este redactor para informarle que les han prohibido colaborar con medios digitales alternativos.

Esta medida, irracional por sí sola, vendría a suponer el fin de las aparentes ventajas económicas que algunos colegas de profesión en la isla disfrutaban al poder cooperar con medios como Oncuba, El Toque, Progreso Semanal, entre otros.


Lo más leído hoy:


Sin embargo es justo señalar que si bien los salarios en moneda nacional que devengan los periodistas en Cuba es bajo, como bajo es el salario que perciben otras muchos profesionales en otras ramas, muchos de estos periodistas ni siquiera, escribían para estos medios por las ventajas económicas, que en algunos casos era poco menos que nada, ya que el pago por artículo en algunos casos era de 5 cuc, en otros de 10 cuc y en otros un poco más.

En el año 2013 el periodista Carlos Manuel Álvarez escribiría un texto titulado "Máquina de Enojos" en el cual abordaba este tema: la supuesta reticencia de la oficialidad de la UPEC con respecto a las colaboraciones con los medios alternativos que vendrían efectuando varios periodistas jóvenes.

En uno de los párrafos del artículo, Carlos Manuel expresaba: "De cualquier manera, si alguien sigue creyendo que el tema OnCuba es estrictamente dinero, y no, probablemente en primera instancia, la posibilidad de un periodismo más decente, ofrezco trasladar inmediatamente mi columna (si no talentosa, al menos honesta y joven) a las páginas de un medio nacional, sin cobrar un solo centavo, y con la única condición de que donde yo diga que la casa se está cayendo, no me vengan a imponer que la foto está desenfocada."

Un asunto que en tres años más seguía sin tener solución.

Esta medida no está clara si ha sido tomada a raíz de una Carta enviada a la UPEC por parte de los periodistas integrantes del Comité de Base de la UJC en el Periódico Vanguardia de Villa Clara.

En la misiva se señalaba que: sin asumir que se trata de un motivo menos importante, también colaboramos porque nuestra posición en la tristemente célebre pirámide invertida nos impulsa a hacerlo, sin descontar que también escribimos porque se trata de nuestro más legítimo deseo. Y nadie nos usa ni se vale de nuestra supuesta ingenuidad. Escribimos lo que queremos e intentamos emplear todas las herramientas periodísticas aprehendidas en nuestras universidades. Nadie altera nuestros textos ni negociamos nuestras posturas revolucionarias. Ahora más que nunca somos y debemos ser totalmente responsables de nuestra opinión.

nadie nos usa ni se vale de nuestra supuesta ingenuidad. Escribimos lo que queremos e intentamos emplear todas las herramientas periodísticas aprehendidas en nuestras universidades

¿Cuántas veces en cuántos plenos y congresos colegas nuestros han alertado sobre la necesidad de revertir el alcance limitadísimo del ingreso de los periodistas? Pero el aumento salarial, tanto como la Ley de Prensa y el reordenamiento de los medios de comunicación, ha tardado demasiado. Mientras aprobamos la llevada y traída ley, mientras se estudie y no se ejecute el aumento salarial, pero sobre todo, mientras las políticas informativas aten el ejercicio del periodismo, nosotros colaboraremos. Y con eso no hacemos ni queremos hacer daño a la Revolución. Todo lo contrario: queremos construir una Cuba diversa, muy lejos del discurso gris y chato. Y debiera asumirse como una ventaja y no como un peligro que seamos nosotros mismos —jóvenes periodistas formados en las universidades cubanas— los colaboradores de esos medios.

queremos construir una Cuba diversa, muy lejos del discurso gris y chato. Y debiera asumirse como una ventaja y no como un peligro que seamos nosotros mismos

Ambos textos, que recomiendo muy encarecidamente se explican por sí solos; sobre todo el último, por ser más actual.

¿Que vendrá ahora? No sabemos.

Muy probablemente ocurran dos cosas: O los periodistas decidan marcharse de sus medios laborales porque a fin de cuentas el salario devengado no les alcanza para vivir, o prohibirán definitivamente estos medios alternativos en Cuba.

En el primero de los casos, supondrá para muchos el cese de la conectividad a Internet, y por ende, ver reducidas sus potencialidades de investigación a la hora de escribir. En el segundo, por improbable, no puedo imaginarlo.

Quizás, o aparecen más pseudónimos en escena, o El Toque, Progreso Semanal y Oncuba (entre otros) tendrán que cubrir la actualidad noticiosa cubana con personas que escriban desde el exilio.

COMENTAR

Archivado en:


¿Tienes algo que reportar?
Escribe a CiberCuba:

editores@cibercuba.com

+1 786 3965 689