El presidente de Ecuador, Rafael Correa, ratificó que en el momento de la deportación de los 121 migrantes cubanos se respetaron todos los derechos humanos, una versión que contradice las denuncias de los activistas, quien alertaron de irregularidades en el proceso de repatriación.
Según reporta Prensa Latina, el dirigente ecuatoriano denunció este sábado que los ciudadanos de la Isla "estaban de paso para llegar a Estados Unidos y querían que México les diera a la brava la visa".
"Querían aprovechar la ley estadounidense de pies secos-pies mojados y para ello utilizaron Ecuador como vía para ir hasta México y de ahí cruzar la frontera con territorio norteño y eso no se puede permitir", criticó.
El dirigente se mostró partidario de la "movilidad humana" y la "ciudadanía universal", pero avisó que el país sudamericano no se involucrará en el tráfico de personas. "No nos vamos a convertir en un país coyotero", anticipó.
En los pasados días 9, 11 y 13 de julio, fueron deportados hacia Cuba tres grupos de 29, 46 y 47 ciudadanos de de la Isla, quienes se encontraban de manera ilegal en territorio ecuatoriano.
La cancillería cubana informó que el proceso se realizó con total apego a lo establecido en la legislación de ambos países y en las normas internacionales vigentes para este tipo de situación.
(Imagen de archivo).
¿Qué opinas?
COMENTARArchivado en: