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Dos notas llegadas a esta redacción llaman poderosamente la atención de este escribidor. Veamos sus títulos: Diario de Cuba: "Expertos: Con Clinton o con Trump el acercamiento seguirá" y Martí Noticias: "Díaz Balart: política republicana buscará la libertad de Cuba."
La primera, mejor armada, recoge un grupo de opiniones de expertos en el tema “Cuba”, y los cuales básicamente aseguran que "gane Trump, o Hillary" el acercamiento hacia Cuba existirá.
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Yo creo que sí. Resulta imposible a estas alturas del dominó - a no ser que desde "Palacio" (en La Habana) haya una vuelta de hoja - no acercar a Cuba con los Estados Unidos.
El pueblo cubano lo desea desde hace más de 50 años; los cubanos desperdigados por el mundo lo ansían. El lío es "cómo".
William Leo Grande, especialista en América Latina de la American University en Washington, dijo recientemente a AFP que "un año después del restablecimiento de relaciones diplomáticas formales, las relaciones entre Washington y La Habana se han movido muy rápido, mucho más rápido del ritmo normal de cambio diplomático". Y menciona el asunto de los cruceros, el servicio postal directo, la autorización a las grandes aerolíneas a volar a Cuba directamente; el ingreso en La Habana de compañías como Starwood, AirBnb.
Bien, estoy de acuerdo. También tenemos a T-Mobile, Sprint....
Sigamos.
"El ritmo del cambio puede ralentizarse de algún modo, porque el nuevo presidente tendrá sus propias prioridades", dijo LeoGrande, y yo añadiría que de acuerdo a quien sea el presidente, este ritmo será más lento o no.
No es lo mismo "entrar" a Cuba de la mano de los republicanos, que de los demócratas. Ya sobre el tema hablaré más adelante, pero con respecto a esto les traigo a colación las palabras de Wayne Smith, ex jefe de la Sección de Intereses de Estados Unidos en La Habana, un hombre que vivió en la Habana y conoce a su gente desde un metro de distancia, y no desde los cuentos que le hizo un abuelo.
Dijo Wayne que estaba "sorprendido de que, a diferencia de hace unos años, las autoridades cubanas ya no son "los sospechosos habituales" de los republicanos".
Otra opinión experta, mencionada por Diario de Cuba es la de Ted Piccone, un analista del Instituto Brookings, quien expresa que "una presidencia de Clinton mantendría el rumbo trazado por Obama; aunque "quizás con un poco más de precaución".
En el caso de Trump, dijo Piccone que este ha sido contradictorio.
Trump - según Piccone - no es el candidato correcto. Trump intentaría "fijar mayores condiciones para el acercamiento", dijo a la AFP.
El escrito de Martí Noticias, por el contrario, intenta convencer a los lectores - principalmente cubanos - que la plataforma del Partido Republicano "tiene como objetivo ayudar al pueblo cubano a obtener su libertad", y lo hace, citando las palabras del congresista estadounidense Mario Díaz-Balart.
Por si alguien tiene dudas de qué va la plataforma republicana, puede consultar en nuestro sitio este tema aquí.
Vuelve Díaz-Balart:
"La plataforma republicana representa un rechazo frontal a la fallida política de Obama sobre Cuba, que ha servido sólo para reforzar el aparato represivo del régimen de Castro” y agregó: “(...) la plataforma republicana tiene como objetivo ayudar al pueblo cubano a obtener su libertad. Este compromiso con la libertad y la democracia va a determinar la política de Cuba bajo una próxima administración republicana."
Sería interesante saber, o preguntarle a Díaz-Balart, qué cosas en concreto, ha hecho él, y muchos otros republicanos como él, para "ayudar a Cuba", aunque yo pudiera responderle desde mi memoria: NADA.
Y nada harán.
Si en todos estos años, con todo el apoyo que tenían - y aún tienen - nunca hicieron nada, y al menos lo que los más jóvenes recordamos es "par de buenos apretones que dieron", cuando la firma de la Ley Torricelli, y la Helms-Burton, para asegurarle al pueblo cubano - en el momento más duro de su historia - que la derrota de Castro, estaría a la vuelta de la esquina.
¿Lo lograron? ¿Tumbaron a Castro? ¿Los bistecs de res llegaron por la libre a 3ra y 70? No. Así que ahora, luego de tantos años de apretones y retorcijones republicanos, no vengan a venderle a "los cubanos" que su plataforma ayudará a la liberación de Cuba. Lo que ha dicho Díaz-Balart, no tengan dudas ustedes de ello, es para asegurar votos. Recuerden que en noviembre son las elecciones.
Ningún republicano "contaminado" tiene nada nuevo para Cuba, porque las políticas y métodos que tienen, no han cambiado un ápice, desde la Guerra Fría.
Nunca ayudaron. Nunca liberaron. Pero no es su culpa.
Recuerden que la maldita culpa, "no la tiene nadie".
foto: Google Plus
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