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Las autoridades francesas identificaron a uno de los hombres que asaltaron una iglesia de Normandía y desvelaron que se trata de un joven galo de 19 años llamado Adel Kermiche, quien ya estaba fichado por los servicios antiterroristas.
El fiscal de París, François Molins, en una rueda de prensa explicó que el otro atacante todavía no ha sido identificado. El representante del ministerio público relató que Kermiche ya fue detenido tras intentar llegar a Siria con la presunta intención de unirse a grupos terroristas, por lo cual estuvo bajo control judicial sin poder abandonar su domicilio.
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Sin embargo tan solo dos meses más tarde el joven desapareció y lo hallaron en Turquía, para tratar de llegar de nuevo a Siria. El segundo intento terminó con su repatriación a Francia.
En la nación francesa estuvo bajo reclusión domiciliaria con la obligación de llevar un brazalete electrónico y la posibilidad de salir únicamente en las mañanas.
Tanto Kermiche como su acompañante secuestraron a cinco personas en una iglesia normanda y degollaron al sacerdote, además de ocasionar heridas a otros tres rehenes.
Hollande: "Francía está en guerra y será larga
La reacción del presidente François Hollande a este nuevo ataque llegó con una declaración nocturna desde el Palacio del Elíseo en la que aseguró que "Francia está en guerra y será una guerra larga".
Los ataques del yihadismo en Francia ya han dejado centenares de muertos y ha obligado a los dirigentes del país a intensificar el estado de emergencia, aprobado por el Parlamento para los próximos seis meses.
El asalto a la iglesia llega dos semanas después que Niza viera como un camión se adentraba en el Paseo de los Ingleses provocando 84 muertos.
La agenda de Hollande incluye un encuentro con la Conferencia de representantes de los cultos en Francia, que reúne a la religión católica, la ortodoxa, las protestantes, el islam, el judaísmo y el budismo.
De hecho el dirigente habló por teléfono con el papa Francisco para expresarle "la tristeza del pueblo francés luego del odioso asesinato del padre Jacques Hamel por dos terroristas".
El jefe de Estado agregó que cuando un sacerdote es atacado, toda Francia se siente aludida, y se harán los esfuerzos necesarios para proteger las iglesias y lugares de culto.
(Imagen de El Periódico).
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