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Logroño, 30 jul (EFE).- El novelista y periodista cubano Leonardo Padura ha dibujado un panorama poco alentador sobre la situación de la literatura latinoamericana, la cual "vive un período muy complicado a excepción de México o Argentina".
Para el premio Princesa de Asturias de las Letras 2015 las causas de este mal momento se deben a los efectos de la crisis de España y las dificultades en la promoción e impresión literaria.
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Padura ha realizado estas declaraciones tras intervenir en el curso "Cultura y literatura cubanas en tiempo de cambio", organizado por la Universidad Internacional de La Rioja.
También ha alertado de la dispersión que existe en América Latina, donde, "muchas veces, un libro que se imprime en Ecuador nunca se lee en Perú", debido a que "no hay circuitos de distribución, a veces, que sean globales".
"Eso hace que la situación sea, a veces, un poco caótica, y lleva a cierta paranoia a los escritores en cuanto a la necesidad de darse a conocer en un mercado global", ha recalcado.
Por su experiencia como escritor cubano sobre su país y la relación que establece con la literatura, el lector, la crítica, el mercado literario y las instituciones en Cuba, ha asegurado que "la situación, a veces, es bastante peculiar para los escritores que escribimos en este país".
"Sobre todo -ha añadido- para los escritores que no tienen sellos editoriales fuera de la isla y dependen mucho de la publicación dentro del país, que está marcada, a veces, por la gravitación de problemas económicos.
Como ejemplo, ha indicado que el pasado año el Instituto del Libro, que es el ente rector de las publicaciones en Cuba, cumplió en algo más de un 30 % su plan de edición, lo que significa que, de cada 10 libros entregados para publicación se publicaron 3,5.
En su opinión, "esta dificultad para la publicación en Cuba complica mucho el desarrollo literario en un país en el que, además, existe una complicación respecto al consumo porque se imprimen muy pocos ejemplares".
Para él, "al no existir un mercado editorial que, de alguna manera, categorice, y al haber estos problemas para la edición, la visibilidad del escritor cubano se hace más complicada y eso limita, en cierta forma, su presencia no solo dentro del país, sino también en los circuitos internacionales".
Padura ha recalcado que la situación es diferente en México o Argentina, que son "grandes países con grandes (figuras) en la literatura", pero ha subrayado que, salvo ambas excepciones, la literatura latinoamericana "vive un período muy complicado".
Cuba, ha dicho, no es una excepción, pero "la literatura en este país -a pesar de las dificultades citadas- sigue siendo mucho más visible y mucho más potente que en otros países, por ejemplo, como Costa Rica, República Dominicana o Panamá".
En su opinión, "tampoco en España las cosas están tan bien para el escritor porque cada vez se lee menos, se venden menos libros, las pequeñas editoriales desaparecen y las medianas se funden".
Todo ello, ha dicho, es fruto de que existe "un proceso de cambio, que tiene que ver no solo con la crisis, sino también con un cambio de sistemas que se ha producido en los últimos 20 años y para el cual las editoriales no estaban preparadas".
Este cambio de sistemas, ha asegurado Padura, ha sido "el paso de la era postindustrial a la digital, con regulaciones y características completamente nuevas e insospechadas hace veinte años", que a las editoriales y prensa "ha pillado muy a contra pie".
En su opinión, "la tecnología emprendió una carrera sin avisar al resto de la sociedad de por dónde y cómo iban a correr".
Sobre sus proyectos, Padura quien es autor de obras como "El hombre que amaba a los perros", "La novela de mi vida" o la serie de novelas policiales protagonizada por el detective Mario Conde, ha indicado que prepara una novela que tiene como escenario la sociedad cubana en la que se han producido "algunos cambios visibles" que probablemente se profundicen en el futuro.
(Imagen de archivo).
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