Fuera de Río 2016, boxeador cubano Yordenis Ugás gana su combate profesional

El bronce olímpico cubano de Beijing 2008 no creyó en el favoritismo de su oponente

 © Yordenis Ugás
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Este artículo es de hace 8 años

Yordenis Ugás, bronce olímpico en Beijing 2008, derrotó por decisión unánime al favorito estadounidense Jamal “Shango” James, en una pelea pactada a 10 rounds.

El welter santiaguero Yordenis Ugás Hernández demostró calidad, y pericia en un combate que ganó - hay que decirlo así - contra todos los pronósticos.


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El favorito y hasta ese momento invicto estadounidense Jamal “Shango” James, no pudo descifrar los golpes y mucho menos la táctica empleada por el cubano, en un combate efectuado en el Turning Stone Resodt & Casino, en Verona, Nueva York.

Ugás no peleaba desde el 10 de mayo del 2014, cuando cayó derrotado ante Amir Iman. La ausencia de 2 años y 3 meses, le proveyó de un proverbial descanso que sin embargo no se notó sobre el encerado.

Aunque perdió cuatro asaltos, la excelente técnica de Ugás, las continuas entradas y salidas, le permitió mayorar el resto de los rounds.Su forja ahora es de (16-3-7 KOs).

Fue un gran regreso, y una mejor demostración, televisada por una cadena como ESPN, y a partir de ahora pudiera recibir mejores ofertas.

Desde ahora el welter santiaguero pudiera recibir mayor oportunidad de las grandes cadenas de TV de Estados Unidos.

Yordenis, en su momento, fue uno de los grandes boxeadores cubanos amateur.

Su salto hacia el profesionalismo debería encaminarlo por una senda de victorias, aunque se encuentra en una división bien difícil, pero calidad tiene. Si logra concretar los cinco sentidos, entender que este es "otro boxeo", y hacer una buena preparación, pudiera tener un gran futuro en el boxeo.

En honor de su rival, "Shango", hay que decir que no habían transcurrido ni 4 semanas de su última pelea, y de hecho, se enteró de esta, 3 días antes, cuando la lesión en un dedo de Bryant Perrella, dejó a Ugás sin rival para su pelea. Fue llamado "Shango", y no dijo que no.

No lució cansado, no lució mal, solo que fue superado por un hombre que en su momento fue uno de los tres mejores boxeadores amateur del mundo. Nada más y nada menos que un cubano.

Al término de la pelea, "Shango" posteó en la red social de Facebook el siguiente mensaje:

Quiero dar las gracias a todos los que me han demostrado amor y apoyo y me han empujado a las alturas que he logrado. Quiero disculparme por no haber sido capaz de llevar la victoria de nuevo a Minnesota, pero con su apoyo continuo prometo que volveré más fuerte que nunca. Tomé esta pelea con apenas 3 días de aviso, contra un peleador duro y fue una gran lección aprendida. Estoy molesto pero más hambriento y motivado que nunca. Felicitaciones a mi oponente y voy a ver a todos pronto.
Gracias, Dios los bendiga.

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