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La reciente noticia de la ampliación de Brasil por tres años más del programa Mais Médicos contrasta con las dificultades que viven los profesionales sanitarios en Cuba.
En el caso del cirujano Eduardo Herrera, natural de La Habana, la paciencia se ha agotado y el pasado lunes renunció a su puesto de trabajo en el hospital Calixto García, según informó 'Martí Noticias'.
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El bajo sueldo, las malas condiciones de trabajo y la prohibición del gobierno cubano de salir del país fueron los factores que desencadenaron esta decisión.
"Las dificultades que paso como profesional prácticamente no me motivan a trabajar en este sistema, y lo otro es las condiciones de vida que llevamos nosotros los cubanos en general, pero en especial, los médicos", denunció Herrera.
La realidad es que el galeno ya demandó al Ministerio de Salud Pública (MINSAP) en marzo pasado después que las autoridades cubanas le impidieran coger un avión rumbo a la República Checa, país donde pretendía participar en un foro internacional de Derechos Humanos al cual había sido invitado.
Este trasfondo político también ha jugado un papel a tener en cuenta en su decisión. "Incluso teniendo vacaciones hay que pedir permiso de salida obligatoriamente, algo que es discriminatorio, porque ningún otro ciudadano, a no ser los médicos especialistas, tenemos que tener ese documento para que nos permitan viajar", reclamó.
Las autoridades migratorias justificaron que su nombre no aparecía en la lista de médicos que tenían ese permiso para salir de la mayor de las Antillas.
"Los médicos prácticamente estamos tratados aquí como si fuéramos esclavos calificados. Un médico aquí en Cuba, sobretodo nosotros que tenemos alguna especialidad, tenemos que tener un permiso que en caso de salir de vacaciones nos impide tener unas vacaciones fuera del país", relató el facultativo a la citada fuente.
No hay que olvidar que el ejecutivo de Cuba eliminó en 2015 la medida que permitía a los médicos caribeños viajar con libertad al extranjero.
Estas limitaciones de viaje ha hecho que muchos profesionales médicos opten por unirse al programa Parole de EEUU para sanitarios cubanos.
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