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El cubano Aroldis Chapman logró su primer triunfo con los Chicago Cubs en la noche en que la franquicia más ganadora de este año celebró su campeonato divisional.
Ya eran campeones de la División Central de la Liga Nacional desde el jueves, desde que cayeron los Cardinales de San Luis. Sin embargo, un rato antes los Cachorros habían perdido su choque de la jornada ante los Cerveceros de Milwaukee, por lo que esa noche no pudieron celebrar su campeonato.
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La celebración fue este viernes, luego de dejar al campo en extrainning a los Brewers con jonrón de Miguel Montero que desató la verdadera fiesta pendiente del día anterior.
Y a Aroldis Chapman le tocó el honor de ganar ese choque, el primero que se apunta con los Cachorros, luego de retirar a ritmo de ponches la parte alta del décimo.
Con 95 victorias, 53 derrotas y 17,5 juegos de ventaja sobre San Luis, los Cachorros son el primer equipo que asegura el título divisional en la MLB este año.
Chapman, que juega con los Cubs desde el 27 de julio, ya había salvado 14 partidos de 16 posibles, había perdido uno, pero no había ganado todavía.
Y la victoria le llegó, si no en el día más importante, al menos en el más emocionante de su equipo en este 2016.
Aroldis acumula con los Cachorros pcl de 1.25, averaje rival de 166 y whip de 0.87, con 37 ponches en 21,2 innings, lo que da idea de la filosa arma de clausura que se consiguió Chicago al contratar al cubano.
Sumados sus resultados con los Yankees, el pitcher más rápido de las Grandes Ligas ha ganado 4 y perdido 1 en 2016, con 1.70 de promedio y 34 salvamentos, a solo 4 de romper su propia marca, establecida y reafirmada en 2012 y 2013, respectivamente, con los Rojos de Cincinnati, su primer equipo en Grandes Ligas.
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